Erdogan quiere ampliar el nuevo palacio presidencial criticado por «fastuoso»

Inaugurado el mes pasado, el nuevo Palacio Blanco que ha hecho construir el presidente islamista es objeto de una viva polémica debido a sus dimensiones y a sus costes, que muchos consideran "faraónicos" y producto de los "delirios de grandeza de Erdogan". El nuevo palacio presidencial, levantado en la zona verde de los alrededores de la capital, es una mole de edificios de arquitectura otomana y neo-selyúcida (la primera dinastía turca), que abarca una superficie nada despreciable de 200.000 metros cuadrados y tiene alrededor de mil habitaciones. El ministro de Finanzas estimó su coste en unos 490 millones de euros.