El recuerdo de Gavrilo Princip divide Bosnia

Y eso que el destino de Europa se decidió en la capital bosnia el 28 de junio de 1914 con los dos disparos mortales efectuados por el joven nacionalista serbobosnio Gavrilo Princip contra el archiduque heredero Francisco Fernando de Austria y su esposa Sofía. Cinco semanas después, arrastradas por sus rivalidades, sus miedos, sus alianzas y la obcecación de sus dirigentes, las grandes potencias europeas entraban en guerra. Duró más de cuatro años, se extendió a todas las regiones del mundo y desangró a Europa: 10 millones de muertos y 20 millones de heridos sólo entre los combatientes, millones de civiles muertos en combates, de hambre, por enfermedad o en los disturbios que sacudieron el continente hasta 1923 desde Polonia a Turquía, pasando por Rusia o Hungría.

Veinte años después de esta «catástrofe original», como la llaman los alemanes, se desató la Segunda Guerra Mundial, de la que salió una Europa arruinada por segunda vez y una superpotencia: Estados Unidos.

En Sarajevo , el centenario del 28 de junio de 1914 está marcado por un concierto de la Filarmónica de Viena, la entonces capital del imperio austrohúngaro. Será el comienzo de una serie de manifestaciones culturales y deportivas financiadas en gran parte por la Unión Europea, a la que no pertenece Bosnia. El mensaje político fue transmitido en Ypres, donde los dirigentes europeos reiteraron, lejos de Bosnia y de sus tensiones, que harán lo posible para mantener a Europa en paz.

Porque un siglo después, la acción y la personalidad de Gavrilo Princip dividen a los Balcanes, que no han logrado reponerse de las guerras sangrientas que estallaron tras el desmembramiento de Yugoslavia en los años 90. Sarajevo , de mayoría musulmana, borró todo rastro del joven activista serbio, cuyo recuerdo asocian con las fuerzas serbias que asediaron la capital bosnia durante la guerra de 1992-95.

Pero los serbios lo consideran un héroe de la lucha de independencia de los eslavos del sur contra el imperio austrohúngaro que había anexionado Bosnia en 1908.

Como consecuencia de todo ello, los serbios de Bosnia y de Serbia no quisieron unirse a las ceremonias oficiales de Sarajevo y denuncian un enfoque «revisionista» de la historia que califica a Princip de «terrorista» y, según ellos, hace endosar la responsabilidad de la guerra a los serbios.

Por eso han organizado sus propias ceremonias del centenario, apadrinadas por el presidente de la entidad serbia Milorad Dodik y el director de cine Emir Kusturica. La población de Sarajevo parece indiferente a este centenario y se resigna a quedarse, una vez más, al margen de la Unión Europea. «En los últimos días se escucha que Sarajevo es 'el corazón de Europa'. Estoy harto de estas frases. Es cínico. Si realmente estamos en el corazón de Europa ¿por qué esta Europa no nos quiere?», protestó Alma Softic, una estudiante de matemáticas.