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ABC Cultural

La burda falsificación del pasado que inventó para los Habsburgo unos orígenes épicos

Frente a los títulos que debían su poder a emperadores medievales muy recientes, ellos presumían de haber sido elegidos por el mismísimo Julio César y una larga tradición de emperadores romanos

Alegoría de la abdicación del Emperador Carlos V en Bruselas. ABC
César Cervera

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España vivió a principios de la Edad Moderna una auténtica obsesión por la pureza de la sangre que, llevado al extremo, pretendía demostrar que todas las grandes casas descendían de cristianos viejos y hasta entroncaban con la Monarquía visigoda. «Las descendencias gastan muchos godos; ... todos blasonan, nadie los imita», decía un poema de Francisco de Quevedo sobre las disparatadas contorsiones que hicieron los cronistas de algunas familias para abrillantar sus pasados.

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