Las mejores tartas de queso de Sevilla: cuáles son y qué precio tienen

Y es que, en los últimos años, el fenómeno cheesecake se ha convertido en una auténtica obsesión para los paladares sevillanos -y los no tan sevillanos-. Con colas interminables para conseguir la última tarta de moda y con versiones de todo tipo, desde las más clásicas de queso-queso, hasta las que incluyen otros sabores como pistacho, galleta Lotus, chocolate o incluso con toques de trufa, las redes sociales han viralizado este postre hasta alcanzar cotas insuperables.

Porque la tarta de queso ha dejado de ser una simple opción de carta para convertirse en reclamo, sello de identidad y motivo suficiente para cruzar la ciudad en busca de esa cucharada perfecta.

En esta ruta hemos seguido el paladar y las recomendaciones de locales y visitantes que no se resisten a pedirla como broche final de cualquier comida o como antojo de media tarde. Para no perderse entre tanto dulce, hemos afinado la brújula gastronómica de Gurmé Sevilla y seguimos el criterio de Álvaro Salinero, nuestro editor y crítico gastronómico, que nos ha chivado algunas de sus tartas de queso favoritas de la ciudad. Una selección que abarca desde tartas de queso de conocidos restaurantes de Sevilla hasta las de pastelerías famosas que coronan los rankings más dulzones de la ciudad.

Así que si eres de los que creen que siempre hay hueco para un pedacito más, apunta esta guía y prepárate para descubrir algunas de las tartas de queso más famosas, originales y tentadoras de Sevilla.

En el barrio de San Lorenzo, el restaurante La Cochera del Abuelo, comandado por el chef Bosco Benítez y la maître Cinta Romero, es uno de esos sitios donde la tarta de queso se ha ganado por derecho propio el estatus de estrella de la casa. Desde que abrieron sus puertas en 2019, esta tarta al estilo donostiarra —inspirada en la mítica receta de La Viña— se ha convertido en el postre más demandado, hasta el punto de que muchos la conocen ya como la tarta de Bosco.

Bosco Benítez, con experiencia en el País Vasco, afinó durante años su receta hasta dar con una versión propia que ha enamorado a los sevillanos: textura natillosa y casi líquida en el centro, sabor equilibrado y sin excesos de dulzor. Una tarta que no necesita más adornos que su cremosa presencia y que se puede pedir tanto en el restaurante como para llevar, siempre con encargo previo de 24 horas.

Si hablamos de tartas de queso diferentes en Sevilla y su provincia, Cal Viva, en Morón de la Frontera, se cuela en la lista gracias a una receta que ha conquistado —y con razón— a nuestro editor Álvaro Salinero. La tarta de queso con higos de Leo Ramos, chef y propietario del restaurante, es un homenaje a la tradición andaluza con un giro sorprendente que ha convertido este postre en uno de los imprescindibles de su carta.

«Receta tradicional de tarta de queso tipo La Viña, pero con un toque distinto gracias a los higos. Estofamos el higo seco con PX y especias, y hacemos una especie de confitura. En lugar de endulzar la tarta de queso con azúcar, como se haría en la receta tradicional, la endulzamos con esa confitura casera que hacemos. Luego, para darle un toque diferente, le ponemos una base de galleta con mantequilla y canela, y después la salseamos con el jugo de los higos confitados. Es uno de nuestros postres más significativos», explica Leo Ramos.

En pleno centro de Sevilla, Barra baja ofrece una propuesta que se aleja del formato tradicional de carta para inspirarse en los puestos de mercado. Al frente están Rafa Liñán y Patricia Moliner, con una cocina de producto que juega al minimalismo y a la potencia del sabor sin disfraz. Desde la barra —para apenas ocho personas—, la experiencia es cercana, casi íntima.

En el apartado dulce, su tarta de queso ha conquistado a los más golosos por su sencillez y su sabor equilibrado. No hay artificios ni cobertura, solo la combinación justa de quesos —crema, brie y una pequeña dosis de azul— que aportan una cremosidad adictiva y un matiz salino sutil. «Es una tarta de queso bastante simple, usamos tres tipos de queso, crema, brie y una pequeña parte de queso azul, para darle ese punto de sal sin que llegue a predominar mucho… no lleva ningún tipo de harina, así que es sin gluten. Lo más importante es el tiempo de reposo una vez cocida en el horno, la dejamos reposar unas 8 horas más o menos para que termine de cuajar», explica el chef Rafa Liñán.

La cervecería Salmedina, en pleno corazón de la Alfalfa, es el rincón marinero del Grupo Tribeca en Sevilla. Un espacio que respira a mar por los cuatro costados y que combina el tapeo clásico sevillano con una cuidada selección de pescados frescos traídos a diario de las lonjas andaluzas.

Su tarta de queso, en formato individual y horneada, es uno de esos bocados dulces que no fallan para cerrar una buena comanda de tapeo y pescado. Un postre sencillo y casero que conquista por su cremosidad y su sabor auténtico.

Ubicado justo frente al Guadalquivir, Río Grande presume de una de las panorámicas más privilegiadas de Sevilla: las vistas directas a la Torre del Oro. Este restaurante, gestionado por el madrileño Grupo Carbón (Larrumba Holding), despliega varios espacios diferenciados, desde dos amplias terrazas gastronómicas a salones con cartas distintas y reservados ubicados en espectaculares miradores acristalados.

Su cocina bebe del recetario andaluz y sevillano, con platos como ensaladilla, croquetas, solomillo al whisky o salmorejo, y una decidida apuesta por el producto local. Las brasas son protagonistas indiscutibles y sobre ellas desfilan verduras, carnes, pescados y arroces secos.

Entre sus postres brilla una tarta de queso horneada que ha conquistado a nuestro editor Álvaro Salinero. Cremosa, con ese punto fundente en el centro, destaca por un sabor potente a queso de verdad, de esas tartas que huyen de lo fácil y apuestan por la intensidad y la textura espléndida.

Si hablamos de tartas de queso en Sevilla, las de La tarta de la madre de Cris se han convertido en una parada obligada para los amantes de este postre. Este pequeño imperio pastelero, levantado por Pilar Molina en el garaje de su casa en Granada hace ya más de una década, encontró su rincón en el centro de Sevilla de la mano de su hija Marta Orta, quien ha traído consigo todo el recetario familiar que ha encandilado a media Andalucía.

La propuesta es sencilla pero irresistible: tartas de queso en múltiples versiones, desde la clásica hasta combinaciones más atrevidas como la de queso azul, brownie, dulce de leche, zanahoria o tres chocolates. Recetas caseras, elaboradas de manera artesanal, que han conquistado a quienes buscan una tarta de queso que no solo entre por los ojos, sino que deje huella en el paladar.

Su versión clásica, cremosa y con ese equilibrio perfecto entre dulzor y acidez, es la más demandada, pero cualquiera de sus propuestas tiene la capacidad de enganchar. Cuenta con dos locales en Sevilla, el de Triana y el de El Salvador.

Que la tarta de queso está más de moda que nunca es algo que nadie discute, y en Sevilla ya tiene hasta su propia tienda monográfica: Ratatouille Cheesecake. Abierta en la céntrica calle San Eloy, este peculiar espacio recibe al visitante con una figura tamaño real de la famosa rata cocinera de Disney, dejando claro desde la entrada que aquí todo gira en torno a la tarta de queso.

El proyecto es obra del hostelero Skander Chatty, responsable de otras direcciones gastronómicas como Mareaviva o Bacanal Burger en Tomares, quien tras el éxito de su tarta de queso payoyo en sus restaurantes ha decidido darle protagonismo absoluto con un local dedicado en exclusiva.

En su oferta encontramos versiones en dos tamaños (grande y pequeña, a 9 y 6 euros respectivamente) pensados para llevar, con un packaging cuidado que invita a disfrutarla paseando o en casa. Además de la receta clásica con queso payoyo, la tienda ofrece otras combinaciones como Lotus, Oreo, Kinder Bueno, Ferrero, Snickers o la original de pistacho con queso parmesano, una de las favoritas de su clientela.

Si la quieres probar sin salir del centro, además de San Eloy tienen otro punto en el centro comercial Lagoh, así como en Los Remedios, donde también ofrecen toda la gama de sabores.