Puré de manzana

Lo primero que debemos hacer es pelar las manzanas, retirarles el corazón y trocearlas bastamente. Ahora rocíalas con el zumo de limón para que no se oxiden.Coloca los trozos de manzana en una cazuela con un poco de agua (sin cubrir), ponemos la tapadera y cocinamos a fuego moderado durante 20 minutos. Si fuera necesario, añadir algo más de agua durante su cocción.En el último momento, destapa la cazuela para que se termine de evaporar el agua, pero siempre vigilando que no se nos peguen las manzanas en el fondo.Una vez tengamos las manzanas cocidas y sin líquido, pásalas por un pasapurés para conseguir así un puré de consistencia cremosa.Vierte el puré en una cazuela, añade una pizca de sal, el jugo de carne y aceite de oliva. Cocina a fuego suave.

Puedes aromatizar el puré con canela, jengibre, cilantro, o con las especies que más te gusten.

Las manzanas que se emplean enriquecen el plato en fibra, necesaria para regular el tránsito intestinal, además de vitaminas y sustancias antioxidantes. El valor calórico de la receta se ve incrementado por su contenido en aceite de oliva, aunque no por ello se puede considerar una salsa grasa.