Helado de vainilla, chocolate y nata

Comenzamos preparando el helado de vainilla. Para ello, calentamos en una cacerola la leche, 150 ml. de nata, la vaina de vainilla abierta por la mitad y sus semillas. Calentamos sin que llegue a hervir. En otra cacerola batimos las yemas de huevo con 120 gr. de azúcar. Sobre esta mezcla incorporamos la leche que teníamos al fuego colada, removemos y volvemos a poner al fuego. Cuando espese un poco añadimos el resto de la nata, del azúcar y una pizca de sal. Removemos hasta conseguir una crema y dejamos que se enfríe en la nevera. Metemos después en el congelador un par de horas. Lo sacamos después para removerlo y evitar que se formen cristales y volvemos a congelar.Ahora preparamos el helado de chocolate. Batimos los huevos con el azúcar y el cacao en polvo. Calentamos la leche y la echamos en esta mezcla. L0 cocemos a fuego lento sin dejar de remover hasta que empiece a espesar. Retiramos y dejamos que se temple. Añadimos entonces la nata y la vainilla. Metemos en el frigorífico unas horas y después repetimos la operación de la nevera de la misma forma que con el helado de vainilla.Por último, hacemos el helado de nata. Para ello montamos la nata con unas varillas y añadimos 75 gr. de azúcar glass al final. Aparte montamos las claras de huevo y le añadimos el resto del azúcar también al final. Mezclamos la nata con las claras con cuidado de que no se bajen. Enfriamos en la nevera y después en el congelador, igual que con el resto de los helados.Cuando tengamos los tres helados listos, servimos en copas una porción de cada uno de los sabores juntos. Podemos acompañar con galletas.

Los helados quedarán mejor si los preparamos en una heladera, pero ésta no es imprescindible para la elaboración de la receta.

El valor calórico de este postre es alto debido al azúcar, el chocolate y la nata utilizados en su elaboración. Los huevos, por su parte, van a aportar proteínas de alto valor biológico.