Recetas de torrijas ricas y fáciles
Entramos de lleno en la Cuaresma con 10 recetas de uno de los dulces que más nos gustan: las torrijas
Las torrijas son, sin lugar a dudas, uno de los dulces más populares de nuestro recetario cuaresmal . Aunque bien es cierto que, en los últimos años, su consumo se ha ido saliendo de los márgenes de las fechas previas a la Semana Santa ... y se ha ido incorporando en las cartas de numerosos establecimientos de restauración. Una evolución que los paladares más dulces han acogido de buen agrado. Del mismo modo que se han aplaudido las numerosas variantes que han ido surgiendo en torno a este postre.
Porque la variedad está servida cuando hablamos de torrijas . Y es que existen tantas recetas como gustos: con leche, vino, miel, azúcar, canela. etc. Y acompañamientos para aburrirnos: helados, cremas dulces, frutas, turrones, etc. La imaginación juega a nuestro favor en este caso.
¿Cuál es el origen de las torrijas?
Pero, ¿de dónde viene la torrija y por qué las tomamos en Cuaresma? No hay una respuesta clara. Hay quien dice que el origen de las torrijas hay que buscarlo en época romana , allá por los primeros siglos de nuestra era.
Otros argumentan que sólo habría que retroceder a la Edad Media para descubrirlo. Y unos últimos, que es en el siglo XIX cuando comienzan a elaborarse como hoy en día las conocemos .
Sea como fuere, en todas estas historias hay un denominador común: las torrijas eran un plato contundente , reconstituyente idóneo para enfermos y, ¡atención! mujeres que habían dado a luz . De hecho, en algunos lugares de España, a las torrijas se las denomina haciendo referencia a este hecho, como por ejemplo en Mallorca, donde se llaman "sopes de partera".
No es de extrañar que este dulce fuera tan popular. Estaba elaborado con ingredientes relativamente fáciles de conseguir : pan, leche y miel. Hay quien dice que la variante con vino surgió porque muchas familias no podían permitirse tener ganado, y por tanto leche, en casa. El vino, además, convertía en menos perecedero este dulce.
Dulces de Cuaresma
Pero, ¿por qué se comen en Cuaresma?
No hay una razón muy sólida, pero se dice que las torrijas al principio eran un dulce que sólo podían tomar las familias más adineradas. Cuando, poco a poco, el acceso a los ingredientes se democratizó, todo el mundo podía hacer torrijas. Fue entonces cuando se perdió cierto interés por ellas. Así que cada vez se hicieron menos.
Sin embargo, la Cuaresma era un momento idóneo para elaborarlas , ya que todos los ingredientes usados en la elaboración de las torrijas cumplían con los preceptos de abstinencia que la población seguía. Así, endulzaban además este periodo de sacrificio.
Lo mismo le ocurre a otros dulces de Cuaresma como la leche frita o los pestiños, y otras recetas de Cuaresma .
Además, al no poder comer carne durante la Cuaresma, se consumía menos pan y éste se echaba a perder. Con las torrijas se aprovechaba este pan . Y es que, cuando hablamos de este postre, ¡todos son ventajas!
10 recetas de torrijas
Aunque existen muchas variaciones de la receta de torrijas, la más habitual es la que se elabora con rebanadas de pan blando mojadas en leche con canela, luego rebozadas en huevo y, finalmente, fritas . Ésta es la que se puso de moda en los últimos años del siglo XIX y la que ha llegado hasta nosotros. Sin embargo, como te decíamos, la imaginación en la repostería lo es todo.
Por eso, te traemos diez recetas para elaborar torrijas como más te guste. Eso sí, recuerda que se trata de un bocado bastante calórico, así que no olvides aquello de "a nadie le amarga un dulce", pero sin pasarse. ¡Vamos a ver nuestras 10 propuestas!
1
Torrijas
Comenzamos con una receta clásica.
Ponemos a cocer la leche con el azúcar, la cáscara de limón y la canela en rama, hasta que hierva. Apartamos del fuego y dejamos enfriar. Empapamos bien las rebanadas en la leche y las pasamos por harina y por los huevos batidos. Freímos en aceite muy caliente hasta que se doren. Dejamos escurrir y espolvoreamos con azúcar y canela en polvo. Dejamos enfriar las torrijas antes de servir.
En lugar de espolvorear las torrijas con azúcar y canela en polvo, puedes ponerles miel.
2
Torrijas de vino
En nuestra segunda receta vamos a ver cómo se elaboran las "otras" torrijas, las de vino, que están muy extendidas en España.
Vierte el vino en un cazo y añádele el azúcar, la canela y la corteza de naranja. Lleva al fuego y deja hervir durante 10 minutos.
Transcurridos esos 10 minutos, retira el cazo del fuego y deja reposar hasta que el vino se entibie. Cuela y reserva.
Corta la barra de pan en rodajas de unos 2 cm. de grosor y colócalas en una bandeja profunda.
Vierte el vino aromatizado sobre las rebanadas de pan y espera a que queden bien empapadas. Ahora pasa las rebanadas por huevo batido y fríelas en aceite de oliva bien caliente. Una vez doradas las rebanadas, escúrrelas bien y deposítalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Espolvorea las torrijas con azúcar y canela en polvo.
3
Torrijas de chocolate blanco
Aquí vamos a innovar. Elaboraremos una torrija acompañada de sabores dulces como puede ser una crema de café, chocolate blanco o crema de leche vainillada. Sólo apto, eso sí, para los paladares más golosos.
Para elaborar la torrija, además, haremos con el pan una especie de brazo de gitano. Delicioso.
4
Torrijas caramelizadas con salsa de toffee
Este es un postre típico de nuestra gastronomía con el toque innovador que le aporta el toffee. Un plato ideal para los más golosos.
Hervimos la leche con el azúcar, la corteza de limón y la canela. Retiramos del fuego y tapamos para que infusiones. Dejamos que se enfríe. Cortamos el pan en rebanadas y las empapamos en la leche, escurriendo el sobrante. Las pasamos por huevo batido y las freímos en aceite bien caliente hasta que estén doradas. Escurrimos sobre papel absorbente.
Para caramelizar las torrijas, mezclamos todos los ingredientes y extendemos esta pasta sobre ellas. Quemamos con un soplete o una pala hasta que adquieran ese color dorado tan característico.
Por otra parte, hacemos la salsa de caramelo poniendo el azúcar en una sartén hasta que caramelice, con cuidado de que no se queme.
Vamos añadiendo la nata poco a poco y sin dejar de remover, hasta conseguir una crema fina.
A la hora de servir, ponemos un poco de salsa de toffee sobre los platos y colocamos encima las torrijas.
Si no quieres que las torrijas se empapen demasiado en la salsa de toffee, puedes servir ésta en un cuenco aparte.
5
Torrijas de leche con frutos del bosque y licor de bellota
Y como las torrijas se prestan a acompañamientos muy diversos, vamos a probar a acompañarlas con frutos del bosque.
Comenzamos cociendo la leche con la ralladura de la cáscara del limón y el palito de canela. Ponemos a fuego lento sin que llegue a hervir. Mantenemos unos 10 minutos. En un bol mezclamos 5 huevos, las yemas, el azúcar y la harina (reservando un poco para rebozar). Mezclamos muy bien y vertemos la leche hervida previamente colada. Mantenemos la mezcla a fuego medio unos minutos sin dejar de remover. Dejamos enfriar unas horas sobre una superficie plana.
Troceamos la masa en cuadrados o con la forma deseada. Rebozamos en huevo batido y harina. Freímos en aceite. Escurrimos y espolvoreamos azúcar. Ahora preparamos un original acompañamiento: en un cazo vertemos la mermelada, el licor de bellota, el agua y el azúcar moreno y dejamos hervir unos 10 minutos.
Añadimos frutas del bosque y ya están listas.
6
Torrijas con manzana caramelizada y helado de fresa
Con esta receta convertimos un dulce tradicional en un postre diferente e igualmente apetecible. Esperamos que os guste.
Hervimos la leche con el azúcar, la corteza de limón y la canela. Retiramos del fuego y tapamos para que infusiones. Dejamos que se enfríe. Cortamos el pan en rebanadas y las empapamos en la leche, escurriendo el sobrante. Las pasamos por huevo batido y las freímos en aceite bien caliente hasta que estén doradas. Escurrimos sobre papel absorbente.
Por otra parte, pelamos las manzanas y las troceamos. Las rociamos con zumo de limón para que no se oxiden.
Ponemos el azúcar en una sartén y lo caramelizamos con un poco de agua. Cuando adquiera color, añadimos la mantequilla y dejamos que se derrita. Añadimos las manzanas para que se bañen bien en el caramelo. Las vamos sacando de la sartén y colocándolas sobre las torrijas.
A la hora de servir, añadimos unas bolas de helado de fresa para acompañar a las torrijas.
7
Torrija con helado de café
Vamos a preparar un dulce tan típico como la torrija pero acompañado de helado de café, para darle un aire más refrescante.
Comenzamos por llevar un cazo con la nata, el azúcar y la canela en rama al fuego. Añadimos también la vainilla y la cáscara del limón. Dejamos cocer y retiramos la vainilla. La cortamos por la mitad raspando el interior y volviéndola a introducir en el cazo ya lejos del fuego. Dejamos que infusione todo.
Ahora nos ponemos con la crema de ron: ponemos a hervir un minuto el azúcar con el agua y el ron y dejamos que se enfríe. Cogemos la pieza de pan y la cortamos en rodajas.
Las mojamos en la primera crema de leche y nata que hicimos. Las pasamos luego por los huevos bien batidos y, en una sartén con abundante aceite de oliva, las freímos bien.
Las colocamos en una bandeja y las regamos con la crema de ron, pasándolas luego por la mezcla de azúcar y canela en polvo. Servimos acompañadas del helado.
8
Torrijas saludables con la mitad de calorías para Semana Santa
Esta receta es perfecta si quieres no sumar demasiadas calorías a tu menú. Y es que las torrijas no están reñidas con la dieta. Aquí lo que vamos a hacer es sustituir la fritura y hacer las torrijas en el horno.
Calentamos la leche de soja con una rama de canela, la miel y las cortezas de limón y naranja y, a continuación, retiramos del fuego y dejamos enfriar.
Cortamos dos rebanadas de pan integral con un grosor de unos 1,5 cm (menos de dos dedos). Vertemos la leche de soja aromatizada en un plato hondo y colocamos las rodajas de pan durante 10 minutos.
Batimos el huevo y pasamos por él las rebanadas de pan. A continuación, colocamos las torrijas en el horno. Tras 5 minutos horneándose, cuando veamos que la parte superior se ha dorado, les damos la vuelta para dorar la otra parte.
Una vez cocinadas, las sacamos del horno y espolvoreamos con canela en polvo al gusto.
9
Torrijas de pan de leche con peras asadas
Preparamos un postre en el que unimos dos recetas tradicionales: las torrijas con las peras asadas.
Elaboramos primero las torrijas. Ponemos a calentar la leche con la canela y azúcar al gusto. Cuando llegue a ebullición, retiramos. Dejamos enfriar y colamos. Ahora, partimos el pan en trozos y lo mojamos en la leche. Rebozamos el pan en el huevo batido y freímos en una sartén con aceite de oliva.
Para las peras, las lavamos y las dejamos macerar en vino blanco unos 3 o 4 minutos.
Escurrimos y colocamos en un recipiente al fuego junto con el azúcar. Dejamos a fuego muy lento hasta que el azúcar esté a punto de caramelo y ¡listas! Servimos las peras con las torrijas y a disfrutar de este rico postre.
10
Torrijas con foie
Y como sabemos que también hay amantes de lo salado, te proponemos una última receta de torrijas un poco menos dulce y acompañadas con foie.
Para elaborarlas, mezclamos la leche y el vino con los huevos. Salpimentamos. Mojamos en esta mezcla las rebanadas de pan, dejando que se empapen bien.
Las pasamos entonces por una sartén con un poco de aceite de oliva. Dejamos que se doren un par de minutos por cada lado. Salpimentamos los escalopes de hígado y les echamos un poco de azúcar moreno. Enharinamos. Pasamos por una sartén sin aceite y mantenemos sólo un minuto por cada lado. Servimos las torrijas con el foie y ¡listo!
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