Máxima preocupación por la enigmática desaparición de Carlos Lozano

Lo cierto es que Carlos ha hecho voto de silencio . Mantiene su número de teléfono pero no contesta cuando se le pregunta a raíz de su perfil bajo. Lee los mensajes pero no hay respuesta. Sus íntimos aseguran que quedó harto del mundo del corazón. Le pasó factura el enfrentamiento entre sus dos ex, Mónica Hoyos y Miriam Saavedra . De hecho, cuando ambas concursaron en GHVIP, él era el encargado de defender a Miriam . Sin embargo, tras un desagradable episodio sucedido entre los tres en la Casa, se fue y no volvió a ocupar su silla de colaborador en el reality para famosos.

En el plano económico se intuye, tras escuchar a los íntimos del ex modelo, que no le va mal. Algunos comentan que vendió dos casas y otros una . Sea como fuere, el dinero obtenido le permite no tener que acudir a los platós para hablar de su vida y milagros. En el plano sentimental, aunque parece que han existido varias idas y venidas con Miriam Saavedra , Carlos se hartó. Lo intentaron varias veces sin resultado. En plena pandemia, cuando el confinamiento era más duro, el presentador expresó que había conocido a una chica y que estaba ilusionado. De la misteriosa mujer se desconocen datos. Lo que sí sabemos es que ha coincidido con Miriam en un gimnasio en varias ocasiones.

Si hay una espina que Carlos lleva clavada es la profesional. Más concretamente, la televisión. Su concurso en GHVIP fue tan bueno que los directivos de Telecinco le premiaron con un programa: Granjero busca esposa. Sin embargo, no fue bien y el presentador fue relegado a otros menesteres. Concursó en Supervivientes, en la edición de Isabel Pantoja, y a su regreso vio claro que no habría más oportunidades como presentador para él en Mediaset . Se había convertido en un soldado de la cadena. Y él nunca ha querido ser uno más. Desea seguir en televisión pero no como personaje, sino como comunicador.