EH Bildu se niega a condenar los homenajes a etarras en el Parlamento Vasco

«Es un grave ataque a la memoria de las víctimas y una manipulación política del terrorismo que ha padecido Euskadi», reza el texto que han consensuado, a iniciativa de los populares vascos, PP, PSE, PNV, Podemos y Ciudadanos. La parlamentaria de Vox también ha votado a favor, lo que ha dejado en evidencia la soledad de los independentistas en este asunto.

Y es que, una vez logrado el acercamiento definitivo de todos los terroristas al País Vasco, es habitual que ahora en los actos de homenaje se pida la excarcelación de los que consideran «presos políticos». Así se refirió Arnaldo Otegi hace tan solo una semana a Iurgi Garitagoitia, terrorista condenado a 44 años de prisión al que un remero le dedicó en televisión el triunfo en la Bandera de la Concha.

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Este jueves los de Otegi de nuevo han vuelto a hacer gala de esa ideología, a pesar de tener al resto de grupos en contra. El portavoz de la formación, Julen Arzuaga, incluso ha presumido en la tribuna de un apoyo a los presos de ETA que «no es nada nuevo». Ha criticado, además, la «falta de iniciativa y obsesión» del PP por un debate que se ha llevado ya «muchas veces» al Parlamento vasco.

Aunque la de este debate ha sido algo diferente que otras veces. Además de lograr una respuesta contundente para el blanqueamiento de los presos que hace el entorno de Bildu, también pretendía evidenciar el rechazo social a los homenajes y brindis que este verano han proliferado en las fiestas patronales del País Vasco. El texto refuerza el compromiso del Parlamento vasco con «la construcción de una memoria inclusiva, crítica, ética y democrática» y pide «deslegitimar cualquier acto de enaltecimiento del terrorismo»

El representante de EH Bildu no ha dudado en calificar esta condena de un acto inquisitorial y ha espetado que la formación no hará «el papel de inquisidor Torquemada». Se ha desligado de los actos, a pesar de que algunos de ellos hayan estado impulsados por Sortu, partido mayoritario de la coalición, y se ha escudado en que no son «responsables» de cada «cartel o pancarta» que se coloca.

La intervención de Azuaga ha recibido una dura contestación del resto de partidos políticos. Para el parlamentario del PP, Carmelo Barrio, los homenajes son «el mejor abono para la cultura del odio» y ha criticado que, a pesar de que se repitan año tras año, no exista una legislación para que los poderes públicos tengan capacidad de impedirlos. En su opinión, deberían ser considerados «igual de repugnantes» que actos de homenaje o saludo «a violadores, a pederastas o a corruptos».

Para el PNV no cabe duda de que se trata de homenajes «vergonzosos» y su representante Joseba Díez ha defendido construir «una memoria inclusiva». Ha resaltado, además, la importancia de «deslegitimar» los valores de los asesinos y terroristas para dejar «asentado» en las generaciones futuras que «no se puede considerar a los asesinos héroes». En la misma línea se ha expresado la portavoz socialista, Miren Gallastegi, que ha acusado a los parlamentarios de EH Bildu de tener un «problema grave» con la memoria. «Siguen negándose a formular una autocrítica profunda de su pasado», les ha reprochado.