Fue ayer cuando la consejera de Interior, Función Pública y Justicia, Amparo López, relató cómo trabajadores de la zona con sus tractores y los equipos de bomberos de Navarra trataban de «anclar» el incendio. Un trabajo que les permitió en la tarde del lunes perimetrar el área afectada, donde ahora el dispositivo, que llegó a contar con doce medios aéreos y la colaboración de tres administraciones (gobiernos navarro, vasco y central), se centra en tareas de refresco y extinción.
La propia Amparo López deslizó que, unido al episodio de temperaturas extremas que experimenta Navarra, habría sido el factor «humano» el detonante del fuego, que ha provocado incidencias en las comunicaciones móviles en Carcastillo, al verse afectada una antena de telefonía. Actualmente, hay abierta una investigación para dirimir si se trata de una acción premeditada.
«Va a ser un episodio largo de temperaturas extremas con niveles de humedad bajo y tormentas secas», advirtió López. Toda la comunidad foral de Navarra continúa en riesgo «extremo» de incendios forestales y los servicios de emergencia plantean la necesidad de evitar convertirse en la «causa», con actividades que entrañen peligro como barbacoas, hogueras en acampadas, el consumo de cigarrillos, el uso de herramientas metálicas o la circulación con vehículos en caminos y pistas forestales con hierba seca.
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