Cuando la patrulla circulaba en el coche con distintivo por el lugar, observó a dos chicos que, al ver a los agentes, se comportaban de manera extraña, como queriendo evitarlos.
Por ello, los funcionarios se bajaron rápidamente del vehículo. Uno de los críos puso pies en polvorosa, pero consiguieron parar al otro. Le cachearon y comprobaron que portaba escondida entre la ropa, en la zona del costado, una enorme espada, tipo bolomachete de unos 40 centímetros.
La actitud del menor no le ayudó en nada. No tuvo empacho en espetarle a los policías, con un tono muy hostil: «Me da igual. Si me detenéis, al día siguiente estoy fuera… He pegado a tíos más grande que vosotros. Llevo esto para defenderme, he tenido otras peleas antes».
El encartado fue detenido y trasladado al Grupo de Menores de la Policía Nacional (Grume), y contaba con antecedentes. De hecho, era un conocido ya de los agentes tutores del distrito.
Precisamente ayer, la Policía arrestó a seis miembros de la banda latina de los Trinitarios por disparar y acuchillar al dueño de unos bares de Ciudad Lineal, presuntamente por un asunto de drogas. Uno de los detenidos es un menor de 16 años.
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