Las salas de conciertos, «decepcionadas con el jarro de agua fría» de la nueva normativa: «El aforo será igual»

Galileo, Gruta 77, Moby Dick, La Palma, El Sol y Tempo Audiophile Club contestan a las preguntas de ABC sobre esta nueva situación.

Ángel Viejo, de Galileo Galilei

¿Cómo valoran la normativa publicada hoy? ¿En qué situación les deja? ¿Les ha roto los planes para el otoño?

La normativa muy negativa ya que nos discrimina con el resto de actividades culturales, quedamos con una precariedad grande ya que no nos permiten un aforo mayor al tener que guardar una distancia entre mesas de metro y medio. Teníamos esperanzas que pudiéramos ampliar aforos para ir yendo a la normalidad como el resto de actividades culturales.

¿Qué previsiones de mejora en cuanto a actividad tienen de aquí a fin de año? ¿Cómo creen que pueden cambiar las cosas en los cuatro meses que quedan de 2021?

Como no se amplíen los aforos de verdad y que las distancias sean menores entre mesas, el futuro es negro.

¿En qué situación está ahora mismo la sala, en cuanto a actividad, bajas de personal, ayudas económicas, etc?

Estoy con la mitad de la plantilla y esperando ayudas para poder seguir abiertos

¿Hace medio año pensaban o intuían que al llegar septiembre las cosas estarían así? ¿O eran optimistas?

No por supuesto que no, todos pensábamos que el ocio controlado como es en nuestras salas y donde no ha habido ningún contagio estaríamos mucho mejor, yo sí era optimista.

Si ahora mismo le estuviera escuchando la autoridad competente en este tema, ¿qué le diría?

Que no se puede discriminar una actividad cultural como es la música en directo, y que nos traten como a los teatros o los cines.

Indio, de Gruta 77

¿Cómo valoran la normativa publicada hoy? ¿En qué situación les deja? ¿Les ha roto los planes para el otoño?

Rompe todas las previsiones de la programación de la sala y las expectativas económicas de este año.

¿Qué previsiones de mejora en cuanto a actividad tienen de aquí a fin de año? ¿Cómo creen que pueden cambiar las cosas en los cuatro meses que quedan de 2021?

Lo primero que nos preocupa de aquí a fin de año es que sostengan en ERTE nuestras plantillas. Recibirlos ahora, con la actual normativa, nos llevaría a la ruina. Necesitamos una normativa ajustada a nuestra actividad. Cuando hablan de porcentajes de aforo no se dan cuenta que con las mesas y la distancia entre ellas de 1.5 metros resulta el mismo aforo aplicando el 50% o el 75%. La realidad es que el aforo lo marca la distancia entre mesas y en Gruta77 esa distancia limita el aforo a 30 personas, el 10% de nuestro aforo legal

¿En qué situación está ahora mismo la sala, en cuanto a actividad, bajas de personal, ayudas económicas, etc?

Todo nuestro personal está en ERTE y trabajamos los dos socios. Estamos haciendo uno o dos conciertos semanales, pero la gente se está cansando de este formato, que encarece además el precio de las entradas. En los conciertos de Gruta una sola persona, yo, está haciendo el trabajo de controlador de accesos, técnico de sonido camarero, producción y limpieza. Añade a esto la labor policial de exigir al público que respete la normativa. El estrés es insoportable. Vamos a reventar.

¿Hace medio año pensaban o intuían que al llegar septiembre las cosas estarían así? ¿O eran optimistas?

Hace medio año estábamos convencidos de que en este momento estaríamos trabajando al 100% de aforo. Simplemente con exigir el pasaporte sanitario en los accesos y tomar la temperatura a los asistentes tendríamos solucionada la situación, estaríamos luchando contra el botellón, censando a la población vacunada de manera automática e incentivando la vacunación de los más jóvenes para que pudiesen asistir a los eventos. No solo es una solución, es una manera de colaborar con la situación sanitaria, trabajar por el bien común. Veo la situación en el fútbol y el Metro y no entiendo cómo a nosotros se nos trata así. No tiene sentido. No es equitativo.

Si ahora mismo le estuviera escuchando la autoridad competente en este tema, ¿qué le diría?

No discrimines a la Música. No criminalizes a un sector comprometido de la Cultura. Medidas consensuadas y razonadas. La lógica dice que podemos trabajar aplicando una normativa más audaz. Usadnos para solucionar la vacunación juvenil, estaremos encantados de colaborar. Sala que cierre, sala que no volverá a abrir. Ciudad sin Música, ciudad muerta.

Roberto Rey, de Tempo Audiophile Club

¿Cómo valoran la normativa publicada hoy? ¿En qué situación les deja? ¿Les ha roto los planes para el otoño?

¡Completamente! Esta normativa apenas supone un cambio con la anterior, ya que manteniendo las distancias entre mesas prácticamente ninguna sala llega ni al 40% de la ocupación. En nuestro caso, en la sala de conciertos estamos en el 20% ya que es una sala pensada para ver los conciertos de pie.

¿Qué previsiones de mejora en cuanto a actividad tienen de aquí a fin de año? ¿Cómo creen que pueden cambiar las cosas en los cuatro meses que quedan de 2021?

Desde la pandemia hemos aprendido a no hacer previsiones ni creer ni esperar nada, tenemos que reinventarnos casi semana a semana en función de las circunstancias, normativas...

¿En qué situación está ahora mismo la sala, en cuanto a actividad, bajas de personal, ayudas económicas, etc?

Tenemos al 100% del personal trabajando, apenas hemos recibido ayudas y estamos en el límite de la supervivencia.

¿Hace medio año pensaban o intuían que al llegar septiembre las cosas estarían así? ¿O eran optimistas?

La verdad es que nos esperábamos más o menos esta situación.

Si ahora mismo le estuviera escuchando la autoridad competente en este tema, ¿qué le diría?

Que no legislen para la opinión pública, que lo hagan con los mejores criterios sanitarios y para todos igual. Tenemos la sensación de que es muy fácil demonizar al ocio nocturno (cuando además nosotros consideramos que somos cultura). Vemos algunas soluciones en otras comunidades, como la del pasaporte Covid que nos parecen efectivas sin dañar tanto a un sector como se está haciendo con el nuestro. Hay otras cosas no las entendemos. ¿que diferencia hay entre que alguien esté sentado en su mesa y que alguien esté bailando pegado a su mesa? ¿porque en los cines y teatros se permite el mismo aforo del 75% con consumo con solo dejar una silla en medio cuando esa distancia es menos de la mitad que la que nos exigen a nosotros? Ya no hablemos de los transportes públicos... a eso me refiero cuando pido que las normas sean para todos igual.

Carolina Pasero Alonso, de Moby Dick Club

¿Cómo valoran la normativa publicada hoy? ¿En qué situación les deja? ¿Les ha roto los planes para el otoño?

La verdad, que si tenemos que valorarlo de alguna manera lo describiríamos como decepcionante y poco práctica. La ampliación de horarios era necesaria y aunque ha llegado tarde, esperamos que haya llegado para quedarse y no den marcha atrás dentro de 15 días. En lo que concierne a aforos, no nos soluciona nada porque los metros cuadrados de una sala son los que son y si el público debe estar sentado y con la distancia de seguridad de metro y medio, la sala da de si lo que da, como si nos ponen al 100%. Yo sigo metiendo el mismo número de personas con 35% que con 75%. Nuestra previsión en otoño era que al menos estuviéramos al 50% de aforo real, público no sentado y con mascarilla. Y por supuesto, barras abierta. Que el público pueda tomarse algo apoyado en la barra es un detalle crucial para nuestra actividad.

¿Qué previsiones de mejora en cuanto a actividad tienen de aquí a fin de año? ¿Cómo creen que pueden cambiar las cosas en los cuatro meses que quedan de 2021?

La ampliación de horarios nos va dar algo más de margen para ampliar la parte de ocio nocturno y ver si al público le apetece estar hasta las 6 de la mañana (hora cierre legal de Moby Dick Club) sentado en una silla disfrutando de la música de un Dj sin bailar. Pero necesitamos que amplíen los aforos de forma real para poder ejercer nuestro trabajo con algo de solvencia y poder sacar a nuestros equipos del ERTE a jornada completa. Desde Moby Dick Club esperamos que para finales de octubre tengamos el 50% de aforo real como mínimo, público de pie y con mascarilla. Y desde luego a navidades necesitamos llegar al menos con el 75% de aforo real sin restricciones o solo con mascarilla para asegurar la supervivencia de la sala. Llevamos año y medio en modo 'supervivencia' y ya los recursos y ahorros se acabaron hace mucho tiempo.

¿En qué situación está ahora mismo la sala, en cuanto a actividad, bajas de personal, ayudas económicas, etc?

Seguimos con compañeros en ERTE parcial o total, y desde luego estas medidas no ayudan a sacar a la plantilla completa del ERTE. A la espera de qué dirá el gobierno sobre la ampliación de los ERTE y por supuesto esperando desesperadamente las Ayudas y Subvenciones de la Comunidad y Ayuntamiento de Madrid, que son más necesarias incluso que el año pasado.

¿Hace medio año pensaban o intuían que al llegar septiembre las cosas estarían así? ¿O eran optimistas?

Sí, era de imaginar por cómo se planteaba el calendario de vacunación nacional. Lo que no tiene sentido es que en septiembre y con la 'vitoreada inmunidad de grupo' iban a seguir con estas restricciones tan poco realistas y prácticas. El optimismo era que actualmente hubieran confiado en el sector cultural, que hemos demostrado ser responsables y adaptarnos bien a las diferentes normativas que iban lanzando, tuvieran o no mucha coherencia y que hubieran publicado aforos parciales sin distancia de seguridad o reducir la distancia, estar de pie, uso de mascarilla, incluso control de acceso con pasaporte Covid, por mucha controversia que acarree.

Si ahora mismo le estuviera escuchando la autoridad competente en este tema, ¿qué le diría?

Ven a mi sala con un metro y vamos aplicar tu normativa de porcentaje de aforos y su practicidad real. ¿Quieres ver mis cuentas? Mis gastos son los mismos y mis ingresos se han reducido al 85% ¿Cómo sobrevivo?

Nabor Raposo, de Café La Palma

¿Cómo valoran la normativa publicada hoy? ¿En qué situación les deja? ¿Les ha roto los planes para el otoño?

Las administraciones siguen condenando al sector, porque en la práctica nada cambia. Cada vez que se habla de este tema todas la administraciones demuestran un absoluto desconocimiento no ya de la realidad de las salas de conciertos, sino del tejido cultural en su totalidad. Creíamos que los cambios iban a ser muchos más ambiciosos, sobre todo con los precedentes que están marcando otros países de nuestro entorno europeo. Una vez más, estamos a la cola. La situación es desamparo total y la impotencia máxima. A lo largo de la pandemia hemos trazado como cuatro o cinco horizontes a partir de los cuales pensábamos que era razonable volver a la normalidad. Eso implica mover muchos bloques de fechas, muchas llamadas. Mucho trabajo en balde, en definitiva. Lo peor es que uno se va a acostumbrando a esto. Por mucho que hayamos sido los más optimistas, no vemos el día de regresar como antes. Romper los planes, no, pero sí que los ha cambiado. ¿Debemos continuar promulgando nuestra ingenuidad a los artistas e insistirles en que podemos salvar noviembre, diciembre? En Café La Palma han tocado bandas como Vetusta Morla, Amaral, Izal o Carolina Durante, obviamente antes de convertirse en lo que son hoy. Hay grupos que sé que o los tengo ahora o el año que viene será demasiado tarde y buscarán aforos mayores. Además, ¿qué pretenden, que volvamos a la normalidad en primavera, cuando vuelvan los festivales?

¿Qué previsiones de mejora en cuanto a actividad tienen de aquí a fin de año? ¿Cómo creen que pueden cambiar las cosas en los cuatro meses que quedan de 2021?

Como sigamos así, no hay previsiones, ni de mejora ni de ningún tipo. No tenemos una bola de cristal. Si algo nos ha enseñado esta pandemia es que nadie tiene ni la más remota idea de lo que va a suceder ni de aquí a dos semanas.

¿En qué situación está ahora mismo la sala, en cuanto a actividad, bajas de personal, ayudas económicas, etc?

Tras un año en el dique seco, volvimos a la actividad en marzo. Intentamos sobreponernos a la realidad y mi sensación es que hicimos las cosas bien. En este sentido, la comprensión de las bandas, las agencias y los sellos fue definitiva para poder sacar las cosas adelante. Bandas como Shego, Boyanka Kostova, Antifan o Detergente Líquido, que en circunstancias normales hubieran llenado la sala, cuyo aforo es de 150 personas, tocaron para 36. Esto significa que haciendo dos pases se trabajaba el doble para ganar la mitad. Y ganar la mitad, para gente que venía de Santiago o de Cádiz, es una buena diferencia. Es la diferencia. Imagínate los márgenes de beneficio que le quedaban a la sala. Ridículos. La respuesta del público, no obstante, fue conmovedora. Después, decidimos cerrar en julio, con la vista puesta en septiembre. Como agosto es inhábil y las instituciones no han movido ficha hasta ahora, a principios de septiembre tuvimos que que cancelar prácticamente todo. Ahora hay que analizar la situación con calma y ver si nuestra actividad es viable en estas condiciones. ¿Qué va a pasar con las ayudas, con los ERTE…? Está todo muy en el aire.

¿Hace medio año pensaban o intuían que al llegar septiembre las cosas estarían así? ¿O eran optimistas?

Hace medio año, en marzo, la secuencia era, efectivamente, volver a la normalidad en verano. Cuando vimos que esto no iba a ser posible, nos centramos en septiembre. Confiábamos en la vacunación, el descenso de la ocupación hospitalaria, la prudencia de la gente. Siempre hemos sido optimistas, pero cada revés hace que el escepticismo esté cada vez más presente en todas las decisiones.

Si ahora mismo le estuviera escuchando la autoridad competente en este tema, ¿qué le diría?

No les diría nada, porque se supone que si son precisamente eso, competentes, tendrían que conocer de sobra la problemática de las salas de conciertos y actuar en consecuencia. Lamentablemente, están demostrado que no es así; en cualquier caso, no soy alguien que disfrute denunciando las limitaciones de la gente.

Miguel Calvete y David Novaes, de Siroco y El Sol

¿Cómo valoran la normativa publicada hoy? ¿En qué situación les deja? ¿Les ha roto los planes para el otoño?

Muy decepcionante para todos los locales de música en Vivo de Madrid y para las sesiones de Noche. Esto es seguir 'muriendo a pellizcos'. en una situación en la que el sufrimiento del impacto recibido se prolonga mas aun sin ver el final del túnel. Y donde ahora para los locales que puedan disponer de mas horario – única diferencia sustancial respecto a como hemos tenido en estos meses- en verdad es una trampa para la gestión de nuestros espacios. Ya que aquellos locales que puedan estar hasta las 5:30 de la mañana al final les obligara dedicar mas recursos de personal pero con el mismo aforo y al tener las mismas restricciones que antes ( agrupaciones, equidistancias y uso de mascarillas)en nuestros espacios de pública reunión , pero abriendo mas horas , al final la realidad será que tendremos mas gastos en personal y con unas medias de consumo menores a las de estos meses de atrás, pues aunque se tenga mas horario las renovaciones de público no serán equiparables a las medias de asistencia que hemos tenido , pues ya hemos visto que nadie se arriesga a ir a un local de noche sin reservar porque las esperas pueden ser eternas. Lo que lleva a que no tendremos mas del público que se nos permite y sin apenas rotación de público esta prolongación sin estar asociada a que se quiten algunas de las restricciones en verdad servirá para bien poco, incluso perjudicar en el conjunto de la gestión de nuestros locales. ¿Si nos ha roto los planes para el otoño? Si esta orden no se modifica y donde desaparezcan restricciones como ya se están dando en CCAA como Galicia, Castilla y León o la misma Andalucía…esto se pondrán mas negro de lo que ya esta. No se puede seguir así y dentro de que aparte tendrán que ayudar económicamente a la Música en Vivo y Noche con determinación en la parte económica y desde luego mayor valentía desde la Comunidad de Madrid.

¿Qué previsiones de mejora en cuanto a actividad tienen de aquí a fin de año? ¿Cómo creen que pueden cambiar las cosas en los cuatro meses que quedan de 2021?

Si no ganamos en aforo real útil que es el que cuenta, y que solo es posible superando de manera parcial o total las restricciones de equidistancias, agrupaciones y mascarillas… aquí la salida es mas que estrecha, es nula, imposible de poder gestionarse como para salvar a una mayoría de las salas. Por creer y esperar desde la sensatez, dada la evolución de como esta en estos momentos la evolución de la pandemia, vamos a desear que se cumplan nuestras mejores expectativas y que para Navidades hayamos podido recuperar los conciertos de pie de pleno y las pistas de baile de una manera muy similar o incluso igual que en tiempos pre-covid.

¿En qué situación está ahora mismo la sala, en cuanto a actividad, bajas de personal, ayudas económicas, etc?

En nuestro caso y gracias a las principales ayudas que han venido desde las áreas de del Ministerio de Cultura como del Ayuntamiento de Madrid, han sido decisivas (aparte de las ayudas generales Europeas gestionadas desde las CCAA). Pero en verdad las pérdidas finales que hemos tenido nos costaran años poderlas cubrir y desde la visión general solo clamar en el dolor que están pasando muchos compañeros del sector y que nos lleva a pedir a nuestras administraciones que no nos dejen morir. Y si destacar de manera muy especial que todo esto no se podría sacar adelante sin el compromiso, entrega y profesionalidad de todos nuestros equipos de trabajo que son los que han hecho posible que hayamos podido seguir luchando – en condiciones muy duras- durante todos estos meses. Vaya un homenaje a todos ellos y que recordar para que no se olvide nadie: que nuestros equipos en su mayoría siguen una gran parte en los Ertes (bien parcial o total) y que tras tantos meses su economía y supervivencia familiar han tocado fondo y hay que ayudarles de manera directa, pues los locales no han podido desarrollar todo el trabajo necesario para poder redondear unos sueldos que les permita sacar adelante su día a día y sus familias.

¿Hace medio año pensaban o intuían que al llegar septiembre las cosas estarían así? ¿O eran optimistas?

¿Sinceramente? Sí.No descartábamos una situación como la que estamos , aunque siempre hayamos querido equivocarnos. Al menos según hemos visto como se han gestionado las situaciones en el ámbito pandémico en general sobre nuestro sector y viendo igualmente la matemática de procederes que se ha dado tanto en España y otros países hacia los locales de publica reunión ¿O erais optimistas? Optimistas hay que ser siempre y lo somos, pero nunca por encima del realismo que con crudeza te muestra la experiencia y la evolución (ya documentada/acumulada) sobre este asunto y en cuanto a nuestro sector.

Si ahora mismo le estuviera escuchando la autoridad competente en este tema, ¿qué le diría?

Si en su día había que cerrarnos por una necesidad social, perfecto, pero por favor compensarnos por ello. Y ante el futuro cuidar a nuestros equipos humanos, ya también muy dañados económicamente y evitar que no se vengan abajo y cierren nuestros espacios de directo y baile. Pues no dejamos de ser los ágoras, los espacios de encuentro de toda la ciudadanía donde la cultura del ocio (directos y pistas de baile) se convierten en un alimento del alma necesario y una de las escuelas ya asumidas para la socialización y aprender a vivir en común desde nuestros momentos de mayor disfrute y calor humano. Algo que en estos tiempos, es más necesario todavía.