Los empresarios madrileños, unidos contra el cierre del Puerto de Navacerrada

Puerto de Navacerrada Estación de Esquí S.A. es la encargada de desmantelar las 7,6 hectáreas que forman las pistas de El Bosque , Telégrafo y Escaparate antes del 30 de octubre, según comunicó en marzo el Organismo Autónomo Parques Nacionales (OAPN), dependiente del Ministerio. El desmontaje, una tarea de envergadura, costaría 10 millones de euros . «Para hacer cualquier modificación necesitas un estudio del impacto medioambiental; para esto igual y lo normal es que no nos la puedan conceder», trasladan desde la concesionaria, «tenemos tuberías a un metro por debajo de las pistas, electricidad, dos depósitos de agua...». Por ahora, la empresa no ha tocado un remonte y ha dejado el asunto en manos de sus abogados.

Los defensores de la estación de esquí —ya se han recabado miles de firmas y se han organizado manifestaciones— tienen dos frentes de batalla: lograr su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) o ganar tiempo. Por su parte, Madrid Foro Empresarial ha pedido un nuevo concurso «con condiciones más beneficiosas a nivel medioambiental». Antes de la pandemia, 10.000 personas visitaban el Puerto de Navacerrada cada fin de semana. La elevada presión turística y el cambio climático, que ha incrementado la temperatura media del monte en 1,95 ºC desde los años setenta, fueron las razones con las que el Gobierno central argumentó su orden. Pero fuentes de la concesionaria son tajantes: «La excusa que ponen es ridícula».

La carretera comarcal que atraviesa el pico es la culpable de los problemas de tráfico que asolan la montaña, aseguran. En cuanto a la subida de las temperaturas, «la estación siempre ha producido y sigue produciendo nieve». De hecho, las tres pistas vetadas son las únicas que disponen de cañones de nieve artificial. Y su desaparición borraría un importante motor económico , no solo para Navacerrada. En total, 30 trabajadores directos, más otros 300 empleos repartidos por el puerto (restaurantes, escuelas, tiendas de alquiler de esquís...) y otros 5.000, según calculan desde Madrid Foro Empresarial, en el resto de municipios cercanos.

La temporada de esquí ya ha quedado atrás y, de momento, los afectados contienen el aliento. «Todo el mundo está esperando que la noticia no sea verdad, entonces nadie se ha puesto a recoger», cuenta el cuarto dueño de la longeva Venta Arias, Álvaro Fernández. La nieve ha abandonado la montaña; la esperanza, aún no .