Galicia plantea unir A-6 y N-VI con un ramal como «alternativa» de tránsito tras el colapso del viaducto

Esta opción, la predilecta, tendría un coste estimado de 1,46 millones de euros y podría estar finiquitada en un plazo de tres meses. Rueda se comprometió a trasladar las propuestas de la Xunta, dentro de su «papel proactivo» , en la mañana de este jueves, durante una conversación telefónica con la secretaria de Estado, Isabel Pardo de Vera, quien asume las riendas de coordinar las actuaciones derivadas del derrumbe del viaducto.

Pardo de Vera remitió a una reunión la próxima semana, el jueves, con participación de Ministerio, Consellería de Transportes, donde expondrán, señaladamente, las conclusiones a las que se haya llegado sobre la causa del desplome. Rueda defendió que se pueden habilitar soluciones «relativamente sencillas» , «frene al panorama actual», con un intenso tráfico pesado atravesando el núcleo urbano de Pedrafita, y a un «coste muy asumible». Y que deben acometerse «cuanto antes», no «prolongarse mucho tiempo».

Como segunda alternativa, la Xunta sugiere habilitar una «variante», con la que se evitaría el tránsito por la parte más poblada de Pedrafita y que lograría que los transportes especiales no atasquen la N-VI en caso de avería. Con respecto a la primera opción, desde San Caetano se aduce que rebajaría plazos y costes; estos últimos caerían sustancialmente, a 150.000 euros. Hasta aquí los pros. Contra:no aprovecha los túneles de Pedrafita. La solución número tres, «de muy sencilla ejecución», pasa por habilitar en doble sentido de circulación el ramal de salida de la A-6 en sentido Galicia, de modo que los vehículos se puedan reincorporar a la autopista antes de los túneles de Pedrafita. Se sugiere activarla provisionalmente, mientras se ejecuta la primera propuesta . El coste «sería muy pequeño, prácticamente se podría hacer con medios de la conservación de carreteras», dicen desde San Caetano.

Más allá de habilitar posibles ayudas, Rueda afirmó que lo que «piden» los transportistas, «ante todo», es que «busquemos alternativas», una solución al tránsito de vehículos, y que «no tengamos esta situación», que es cada vez «más complicada», « ni un día más de lo necesario ». El titular de la Xunta llegó a afirmar que «si el Ministerio no quiere»intervenir, «ahí estará la Xunta» si no queda otra opción. Pero Rueda dijo confiar en que se «escuchen» las propuestas de la Xunta y el problema no degenere en una «pelea política».

Sobre el tramo afectado, apuntó que «lo lógico», si se prevé es que vuelva a sufrir un desplome, es «derribarlo». «No digo que haya que tirarlo», matizó, pero si se opta por espera a que caiga, abogó por «agilizar» el procedimiento y « proceder directamente al derribo ».