Feijóo da negativo y pide disculpas por los «segundos» en los que se retiró la mascarilla en el acto con Casado

Unos segundos estuvo el líder gallego sin mascarilla durante el acto del viernes. Sin embargo, el presidente autonómico ha pedido disculpas por ello: «No tengo inconveniente en disculparme», ha concretado el presidente a las preguntas de los medios de comunicación. Aún así, reconoce, fue un acto «en el que se cumplieron las normas», recoge Ep. El presidente autonómico dijo que el positivo de la conselleira les «llevó a pedir hacer una PCR a todas las personas que estaban en ese acto » , empezando por los propios medios de comunicación algo que, de primera mano, pudo comprobar ABC al haber estado presente en el acto.

Aún así, el presidente autonómico se ha reiterado en sus disculpas, por esos segundos en los que estuvieron sin mascarilla, de camino para posar para unas fotos y cuando Feijóo estaba sin mascarilla y abrazó a Casado, que sí la llevaba, al final de su alocución. Fueron unos «segundos» entre que «uno habla» y se pone la mascarilla y «se puede tocar a una persona» : «Si eso puede producir algún interrogante, el primero que tiene que disculparse soy yo», ha matizado.

Además, Feijóo ha añadido que el contacto «espóradico» que hubo, fue con «mascarilla, cumpliendo todos los protocolos» . Si alguno de los asistentes diese positivo, «por supuesto que debe cuarentenarse», ha concluido el presidente.

Los líderes de la oposición en Galicia han recriminado en su intervención en el Parlamento las imágenes sin mascarilla del presidente. Tras desear una pronta recuperación a la conselleira do Mar, la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, ha dicho que le parece «una asunto muy grave que debe ser aclarado» la actuación de Feijóo en el acto del viernes, con unas imágenes sin mascarilla que «no parecen nada edificantes». Por su parte, el secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, ha pedido que se «extremen las precauciones» en su intervención en el Parlamento. Pidió prudencia y responsabilidad e instó a los representantes públicos a dar ejemplo para que «ningún error de nadie» pueda suponer contagios, recoge Ep.