Buscan a los autores del incendio de Verín, ya estabilizado

En paralelo a las pesquisas, centradas en la localización de posibles sospechosos , ayer continuaron las tareas sobre el terreno. El dispositivo total, integrado por 55 agentes, 97 brigadas, 63 motobombas, 6 palas, 18 helicópteros y 9 aviones, logró mantener a raya las llamas en las laderas de Vilamaior. Motivo por el cual la Xunta salió ayer a responder a las críticas vertidas en los últimos días por varios alcaldes y sindicatos. La administración calificó de «ejemplar» la coordinación de un grupo compuesto por 600 unidades y que logró habilitar medios aéreos doce minutos después desde que se detectara el fuego. «El viento y el lugar en el que se registró dificultó mucho el trabajo de los brigadistas y no se pudo hacer nada para detener su avance. Lo que sí se logró es que no afectara a los núcleos de población», agregó el Ejecutivo gallego.

La Xunta también denuncia que, en particular, la comarca de Verín y sus alrededores padecen un grave «problema incendiario» . Se trata de un lugar donde «año tras año» se repiten los fuegos, casi siempre causados por el hombre e imposibles de detectar sin la necesaria colaboración social e institucional.