Feijóo: «No quiero gobernar para practicar revanchas de ningún tipo»

A solo unas horas para el inicio oficial de la campaña electoral, Alberto Núñez Feijóo sacó a relucir su versión más moderada en la presentación del programa del Partido Popular. La que siempre ha exhibido en sus años como presidente de Galicia y con la que se quiere presentar ante los españoles en las elecciones del 23J. Un Feijóo decidido a acabar con el sanchismo, pero también a recuperar los grandes pactos de Estado con el PSOE, partido al que tendió la mano en diferentes momentos de su discurso.

«Si gano las elecciones llamaré al líder del PSOE para que me deje gobernar y si no lo hace llamaré a sus barones para que le convenzan. Le quedan algunos sensatos, aunque le quedan pocos», señaló el líder popular, que ahondó en su idea de devolver al Estado sus competencias arrebatadas por las minorías (independentismo y populismo) en la pasada legislatura. «A quien lidere el socialismo tras la caída del sanchismo le pediré que me ayude a quitar poder a Bildu y al independentismo como he hecho en algunos ayuntamientos y diputaciones tras las últimas elecciones a cambio de nada», señaló.

Feijóo, que no hizo ni una sola mención a Vox en todo su discurso, reiteró que tratará de gobernar para todos si los españoles le dan su confianza y que lo hará sin resentimientos. «Derogar el sanchismo significa derogar leyes, pero no para practicar revanchas. No quiero vengarme. Buscaré volver a encontrarme con el PSOE que fue y que el sanchismo ha anulado. Ojalá después de él vuelva a los pactos de Estado».

La primera medida que el gallego tomará cuando llegue al Gobierno será cambiar al responsable del CIS, en un gesto que refleja la «descolonización de las instituciones» tomadas por el sanchismo. «No habrá un Tezanos en mi Gobierno y su cese será el primero en el Consejo de ministros», señaló.

Además, dijo que sus medidas tendrán en cuenta a las clases medias y trabajadoras, sin señalar a nadie. «Ningún Gobierno está para señalar a nadie, ni a los empresarios, ni periodistas ni jueces. No comparto insultar a Amancio Ortega, pero no le voy a pagar el cine; no comparto insultar a Juan Roig, pero no veo razonable pagarle el tren de cercanías; y no comparto insultar a un futbolista que gana millones de euros, pero no le voy a dar 20.000 euros para empezar un negocio», apuntó en referencia a los cheques universales aprobados por este gobierno a los jóvenes o jubilados sin tener en cuenta su renta.

Feijóo se ha comprometido con un Gobierno «decidido a trabajar como adultos». El presidente del PP juega la idea de la profesionalización en contraste con el pulso con la coalición: «Solo lo serán (ministros) si acreditan máxima preparación y cero sectarismos. Que nadie cuente conmigo para otorgar máximas responsabilidades a quien no ha acreditado nunca nada». Se ha comprometido con la idea de un Gobierno «más pequeño» en todos los niveles.

En sus apelaciones al PSOE y a la idea de un «cambio tranquilo», Feijóo ha justificado su decisión de no derogar la reforma laboral, apostando por ajustes puntuales y negociados con los agentes sociales: «No quiero gobernar para practicar revanchas de ningún tipo (…) Seremos un Gobierno justo, no revanchista. Sereno, no vengativo», ha dicho Feijóo. Su apuesta más allá de lo programático tiene que ver con la idea bajar los decibelios de la actualidad política: «Las vendettas, el sectarismo y los egos pretendo que se vayan también con el actual presidente y el actual Gobierno».

Feijóo se ha comprometido a «explicar en la medida de mis posibilidades el giro en la cuestión del Sahara». También ha vuelto a comprometerse con la recuperación del delito de sedición y se tipificará como delito la convocatoria de referéndum ilegal.

A la presentación del programa electoral para el 23J han asistido los vicesecretarios Esteban González Pons, Carmen Fúnez, Pedro Rollán, Juan Bravo y Carmen Navarro; y diversos miembros del Comité Ejecutivo y de la Fundación Reformismo 21, encabezados por su presidente, Pablo Vázquez.

También Marcelino Oreja Aguirre, que ha tenido una especial mención del presiente del PP, así como los ex ministros Íñigo Méndez de Vigo y Fátima Báñez, y el ex secretario de Estado Ramón Gil casares.

Por otro lado, en el sector de la Economía, ha asistido Carmen Vidal (secretaria de Política Insititucional de CCOO), Fernando Luján de Frías (vicesecretario general de UGT), Celia Ferrero (vicepresidenta de ATA), Alberto González Ruiz (secretario general de CEOE), Fermín Albaladejo (presidente de CEAJE), Luis Aribayos (secretario general de CEPYME), Pablo Campos (presidente de Oliver Wyman), Rodrigo Álvarez (director general de ASPAPEL), Federico Ramos de Armas (director de AGBAR) e Ignacio Larracoechea (presidente de PROMARCA).

Además, han estado representados amplios sectores de la sociedad civil a través de los representantes de de CERMI, COCEMFE, Autismo España, Plataforma de la Infancia, Satse, Save The Children, Plataforma del Tercer Sector, Apramp y ONCE.