Feijóo define a Guardiola como una mujer «brillante» y ella se reivindica: «No nos hemos roto. Estamos aquí, enteritos»

El proceso generó mucha incertidumbre en el PP extremeño y malestar en otros territorios del PP por la dureza contra Vox. Este viernes en Badajoz todavía se dejaban sentir las heridas de aquellos días. María Guardiola ya será presidenta de Extremadura la próxima semana. Pero el acto con Feijóo todavía estaba presidido por la excepcionalidad. Al término del mismo se respiraba una sensación de liberación. El mitin sirvió como una suerte de terapia colectiva.

Guardiola, que se centró en un discurso pensando en cómo se comportará cuando sea presidenta sí tuvo un pasaje liberador: «Porque estos políticos infantiles y caprichosos, esta nueva política que desde luego de nueva no tiene nada utiliza a nuestro partido como si fuera una piñata a la que golpear con fuerza en sus fiestas de cumpleaños y algo sé yo de esto también. Pero no nos hemos roto, qué va, y no hay chuches, estamos aquí, enteritos. El Partido popular es mucho más que su entretenimiento».

Guardiola, aclamada como presidenta por los suyos y que al finalizar el acto se vio agasajada por sus simpatizantes, se reivindicó ante quienes decían que su proyecto era a medio y largo plazo. Y advirtió a Feijóo que cuando sea presidente defenderá los intereses extremeños por encima de cualquier circunstancia. Porque Extremadura «se resiste a ser una región apartada y condenada a políticas caducas». La futura presidenta extremeña es consciente de que tiene que enterrar en gestión los sucesos que han alumbrado su Gobierno: «Voy a llamar a tu puerta para defender Extremadura», le ha dicho a Feijóo.

Cuando Feijóo subió a hablar era consciente de la expectación del reencuentro. «Tengo que ir para venir a ver a María Guardiola», justificó el presidente del PP para explicar que el primer mitin fuese en Badajoz. «María Guardiola es una mujer brillante, María Guardiola es una mujer aguerrida. Y como es una mujer brillante y aguerrida va a ser la primera presidenta de la Junta de Extremadura«.

El presidente del PP defendió que en Extremadura se ha llegado a un acuerdo «con papeles, con los contenidos, con la publicidad y con el corazón». En contraposición a los pactos alcanzados por Pedro Sánchez «que no es capaz ni de acreditar». En este sentido aseguró que «escuchar al sanchismo dar lecciones de pactos es un sarcasmo». Y reivindicó que «ojalá todos los pactos en España los últimos años fuesen igual de transparentes que el de Extremadura».

No obstante, tras tener que aceptar la presencia de Vox en el Gobierno de la Junta, en el entorno de Guardiola están satisfechos porque el pacto es muy limitado en cuanto a las cesiones competenciales. Pero Feijóo ha vuelto a dejar claro que quiere lo que anhelaba Guardiola: un Gobierno sin Vox. El presidente del PP ha trasladado que quiere «un Gobierno eficaz, un Gobierno sin intermediarios, sin comisionistas, que salga directamente de las urnas, sin contaminar, que solo obedezca a los votantes».

El PP busca optimizar sus apoyos y reclama el voto útil especialmente en aquellas provincias en las que Vox puede no obtener representación, y que volverán a ser bipartidistas en el reparto de escaños. Feijóo ha insistido en que «la papeleta que garantiza acabar con el sanchismo es la del PP», dijo, alertando de «esos votos que no consiguen diputado». El líder del Pp, que mañana estará en Zamora, pidió el voto «para que en España no haya ni bloques ni bloqueos».