La defensa carga contra la Liga en el juicio del Levante-Zaragoza

La versión de Anticorrupción, el Deportivo de La Coruña y la Liga de Fútbol Profesional coincide en que el Zaragoza transfirió a sus jugadores 965.000 euros -según el escrito de acusación del fiscal- y éstos se lo dieron en efectivo a los granotas para que se dejasen perder y asegurasen al equipo maño la permanencia en Primera división. Continuidad que se disputaba por tres puntos con el Dépor, que sí bajó de categoría ese año. Al parecer, un escrito de Hacienda apuntala la versión de las acusaciones. Los jugadores del Levante -que recibieron presuntamente el soborno- apenas tocaron el dinero de sus cuentas durante el verano posterior al supuesto amaño.

En esta vista inicial dedicada a las cuestiones previas, la defensa del Zaragoza -acusado como persona jurídica- pidió la nulidad del proceso porque considera que con la denuncia que propició su apertura, Javier Tebas , actual presidente de la Liga, traicionó el secreto profesional como abogado. Tebas reveló la información que le proporcionó como cliente uno de los jugadores del club aragonés, cuya identidad no se aportó.

Una solicitud a la que se adherieron el resto de letrados de la defensa, que consideran esta circunstancia «gravísima». Pero la Fiscalía niega que el entonces vicepresidente de la entidad deportiva obtuviera la información de manera ilegítima y descarta que se haya vulnerado algún derecho fundamental, puesto que el secreto profesional no está considerado como tal. Aunque no es la única cuestión que tendrá que resolver el juez antes de que arranque de nuevo la vista hoy miércoles.

Las defensas piden también que se impugne y no se admita en el proceso el informe estadístico que la Liga presentó ante el juzgado con el número de jugadas y ocasiones perdidas, para sustentar su tesis de que se pactó el resultado de aquel partido el 21 de mayo de 2011. En este documento, se constata, por ejemplo, que fue el encuentro con menos tiros a puerta por parte del Levante de toda la temporada, con solo dos intentos de marcar al equipo contrario. Uno de los letrados consideró que se trata de un documento «fabricado» por la propia acusación, que «para sobreponerse a un posible archivo, no tiene más remedio que buscar material adicional».

El fiscal no se opone a la petición de los abogados de los acusados de que sus clientes puedan ausentarse de las sesiones en las que no tengan que declarar, siempre que se utilice un criterio unificado, algo que también tiene que dilucidar el titular del juzgado de instrucción número 7 de Valencia.

Precisamente, a la salida del mismo, el exentrenador del Zaragoza, Javier Aguirre , preguntado por una posible sentencia condenatoria, aclaraba que «de momento» no se sabe si el proceso sigue adelante, en referencia a la petición de declararlo nulo. El fiscal solicita para Aguirre y para el resto de directivos del club -incluido su expresidente Agapito Iglesias- dos años de prisión y nueve meses de multa con una cuota diaria de 50 euros.

Para cada uno de los 36 futbolistas procesados , las dos plantillas que disputaron el partido, se plantean penas de dos años de cárcel y seis de inhabilitación para la práctica profesional del deporte. La Liga eleva la petición hasta los cuatro años de prisión, la condena máxima prevista para delitos de corrupción deportiva.