El círculo de Puigdemont intentó lucrarse también con el Covid

«David Madí ha intentado obtener rédito económico de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus» , señala el juez en el auto con el que justificó su detención y registro de su domicilio el pasado miércoles. Esos negocios pasaron por «activar una vez más» sus contactos políticos, como el de Víctor Cullell, secretario del gobierno catalán, y Braulí Duart, secretario general de la Consejería de Interior de la Generalitat. Este último fue quien le había explicado el «desbarajuste» en la gestión del gobierno catalán en la crisis sanitaria.

Eso sí, el juez admite en sus resoluciones que «hasta el momento no se ha podido corroborar si esas intenciones fructificaron», pero no descarta que David Madí pudiese haberse beneficiado «por alguna adjudicación pública» . Los investigadores apuntan a que Madí y Vendrell se asociaron para así «obtener un mayor rédito económico» : querían hacer negocio proveyendo de test rápidos para la detección coronavirus a la administración catalana, aunque el juez no tiene constancia de si esos intentos llegaron a fructificar.

El exmiembro de la banda terrorista Terra Lliure participó en la gestión de los centros que se abrieron en Cataluña para ingresar a ancianos procedentes de residencias afectadas por el Covid. A cambio, según el juez, percibió 5.000 euros. Las conversaciones telefónicas interceptadas han desvelado que Vendrell acusaba a la Consejería de Salud de la Generalitat, en manos de Esquerra, de haber dejado los geriátricos «al pide de los caballos» . En una de esas conversaciones, sugería al ahora presidente en funciones del gobierno catalán, Pere Aragonès, que el separatismo debería aprovecharse políticamente de la crisis sanitaria: «No hemos salido con ventaja, aquí el independentismo necesita salir con ventaja de la crisis... porque si no, no podemos... no podemos marcar paquete . No, no.. cómo le quieres hacer creer a la gente que con la independencia estaremos mejor».

Los movimientos de Vendrell, sin embargo, no se acabarían en el ámbito sanitario, ya que, según la tesis del juez, también usó su influencia política para contactar con miembros del gobierno catalán con el fin de beneficiarse en varios negocios más. Además de la fabricación de esos test, el tráfico de influencias se extendería a operaciones relacionadas con el tratamiento de residuos municipales, laboratorios de biomecánica y hasta recalificaciones urbanísticas.

Madí y Vendrell son dos de los nueve detenidos que ayer quedaron en libertad después de que la Fiscalía no estimase oportuno controlarles con medida cautelar alguna. Los nueve se acogieron a su derecho a no declarar y fueron recibidos con vítores a las puertas del juzgado por una comitiva de cargos secesionistas . En el operativo del miércoles, contra el supuesto desvío de fondos públicos hacia la órbita independentista, fueron detenidos un total de 21 empresarios y excargos públicos, pero 12 de ellos ya quedaron en libertad el mismo día tras comparecer ante la Guardia Civil. La causa sigue abierta por los delito de soborno, malversación de caudales públicos, prevaricación y desórdenes públicos, entre otros.