El Ayuntamiento de Barcelona no acatará la sentencia en base a su Ordenanza de Protección de Animales

En el caso del Ayuntamiento barcelonés, y a falta de que se detalle el contenido exacto del informe y su estrategia jurídica, se apelará por un lado a la moción del pleno que en 2004 declaró la capital catalana como "ciudad antitaurina" y, de manera principal, a la modificación en 2014 de la ordenanza de animales .

En la citada regulación se prohíbe la celebración de cualquier tipo de espectáculo taurino, tanto los que se realizan en el interior de plazas como fuera, una forma de vetar también a los "correbous", indultados por el Parlament.

Fuentes muncipales han señalado a este diario que el informe encargado a los servicios jurídicos municipales y al Depatamento de Protección de Animales todavía no está terminado, pero que se lleva trabajando en él desde hace meses.

En cualquier caso, subrayaron las mismas fuentes, en el Consistorio dan por hecho de que los toros no regresarán a Barcelona. Así se pronunció la alcaldesa Ada Colau en un "tuit" de urgencia: «Barcelona es ciudad antitaurina desde 2004. Diga lo que diga el TC, haremos cumplir las normativas que impiden maltrato a los animales".

De hecho, la ordenanza municipal es tan estricta que no permite ni las corridas de toros ni incluso escenas que lo simulen. De hecho, ya un año antes de la modifiacación de la ordenanza el Ayuntamiento vetó la grabación de una corrida ficticia en La Monumental para una película protagonizada por Sean Penn y Javier Bardem.