De ahí que considerara que la militancia del PSOE, que en el caso de Castilla y León asciende a unas 10.000 personas, lo tienen «mayoritariamente claro» sobre la consulta sobre el acuerdo Sumar y otros partidos políticos para formalizar un Ejecutivo progresista, aunque ha abogado por respetar su voluntad soberana ya que su formación ejerce la democracia interna con «garantías».
Con motivo de un homenaje a los represaliados por el Franquismo, organizado por el PSOE de Zamora, Ana Sánchez, ha señalado que ya le hubiera gustado ver al Partido Popular que hubiera consultado a sus militantes si querían hacer pactos contra la «extrema derecha» y que tomara decisiones en el Consejo de Gobierno de la Junta contra los derechos de las mujeres, los inmigrantes, el colectivo LGTBi, los agricultores y las familias.
«Llamo a la participación de la militancia por que los socialistas van a defender la construcción de un gobierno progresista para el país que evite que la extrema derecha llegue al Consejo de Ministros», ha aseverado.
Además, advirtió a los dirigentes del PP que no van a consentir ni una sola falta de respeto ni acusaciones de desigualdad con otras comunidades cuando en el ámbito de sus competencias son «incapaces» de «garantizar» la igualdad entre castellanos y leoneses, informa Ical.
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