Detenido por agredir a ancianos y su posible vinculación con tres muertes en Valladolid

El hombre, vecino de Valladolid y de 43 años fue arrestado sobre las 23.00 horas del sábado también en el mismo barrio. Los agentes lo pillaron a la altura de la calle Góngora tras recibir varios avisos de agresiones a personas de avanzada edad. Una vez detenido, descubrieron que, además, era el marido de una de las mujeres halladas muertas unas horas antes, tras recibir una llamada al servicio de emergencias de una mujer que aseguraba que «no» sabía que le ocurría a su hija. Al llegar, un incendio en el interior. Sofocadas las llamas, los bomberos encontraron los cadáveres de dos mujeres, una madre y una hija, de 78 y 54 años.

Tan sólo cinco minutos antes, a las 16.25 horas, otra llamada había alertado del humo que salía del primer piso del número 2 de la calle Marqués de Santillana, a escasos doscientos metros del otro domicilio donde también se produjo un incendio, presuntamente provocado, según fuentes de la investigación, y fueron halladas muertas las dos mujeres.

La Policía Nacional, que investiga lo ocurrido en la trágica tarde de este sábado en Valladolid, con tres posibles homicidios, también indaga sobre la relación del detenido con la muerte violenta de Carlos, el hombre de 72 años fallecido en su piso de la calle Marqués de Santilla, quien también fue hallado carbonizado y con signos de violencia.

La detenido del hombre de 43 años se produjo tras agredir a varios matrimonios en la noche del mismo sábado en el propio barrio. Según han informado desde la Subdelegación del Gobierno en Valladolid, fue detenido como presunto autor de las agresiones a dos parejas de avanzada edad. La primera de ellas ocurrió sobre las 22.30 horas en la calle Amor de Dios. La segunda, unos minutos después, en torno a las 22.50, cerca, en la calle Gutiérrez de Cetina. Este último matrimonio tuvo que ser trasladado al hospital debido a las lesiones que sufrió.

Según las investigaciones de la Policía Nacional, la intención del hombre era introducirse en los domicilios de sus víctimas, algo que no consiguió, y que llevó a su detención en unos minutos por parte de los agentes del Cuerpo, que tenían un amplio despliegue por la zona después de la trágica tarde.