Investigada una mujer de 50 años por conducir de noche en sentido contrario durante ocho kilómetros por la autovía A-42

Accedió a la autovía el domingo 22 de mayo, a la altura del centro comercial La Abadía, sobre las 22:20 horas. Las cámaras de seguridad de la Dirección General de Tráfico (DGT) lo atestiguan: el vehículo entró en la A-42 por el carril de deceleracion sentido Madrid, pero circuló hacia Toledo. Lo hizo hasta que salió en el kilómetro 73, en el enlace de acceso al barrio toledano de Santa Bárbara. En este trayecto, se cruzó con numerosos automóviles y varios conductores tuvieron que evitar la colisión con el turismo.

El Servicio de Emergencias 112 de la región y la Central Operativa de Tráfico (COTA) de la Guardia Civil recibieron varias llamadas telefónicas alertando del peligro; la primera, de un periodista que se encontró con el coche que circulaba en sentido contrario.

En su recorrido, el vehículo incluso pasó a la altura de la sede del destacamento de Tráfico de Toledo, situada en la glorieta del Salto del Caballo y a unos 300 metros del acceso a la A-42. Pero las patrullas que salieron en su busca no lograron encontrar el turismo.

Afortunadamente, las cámaras de seguridad de la DGT grabaron la matrícula del automóvil, aunque no fueron las únicas, ya que un vehículo de la marca Tesla la captó con su sistema de grabación.

Con todo, la mujer fue localizada dos días después por la Guardia Civil. Su grupo de Investigación y Análisis del Tráfico (GIAT) en Castilla-La Mancha lo consiguió. También halló el coche que presuntamente conducía. Le tomaron manifestación como investigada, pero no fue detenida.

Los agentes han propuesto además a la Jefatura Provincial de Tráfico que la mujer sea sometida a un reconocimiento médico extraordinario por «pérdida de aptitudes psicofísicas». Generalmente, este examen se realiza para comprobar si sus condiciones son aptas para conducir y no presenta carencias físicas o psíquicas que le dificulte o impida el manejo de un automóvil con las garantías suficientes de seguridad, explican a 'ABC' desde el instituto armado, «dado que es una persona que ha cometido un delito de conducción temeraria». En muchas ocasiones, son personas de edad avanzada, aunque no es este caso.