Diego Carretero se lleva el triunfo en la primera corrida de Añover de Tajo

Abrió plaza el torero Adrián de Torres, que recibió a su oponente con garbo y entrega. Luego con la pañosa en la mano estuvo decidido y entregado, llegando a tener momentos lucidos por ambos pitones. El fallo con la espada le privó de haber tocado pelo, pese a lo cual el público se lo agradeció con una cariñosa ovación tras el arrastre de su oponente. En su segundo de la tarde, Adrián quiso recuperar el triunfo que debía haber conseguido en el que abrió plaza, pero las cualidades del toro le negaron lo hecho en el que abrió plaza. Recibió al serio toro por verónicas en el comienzo de su trasteo. En el tercio final se entregó en demasía, viéndosele trazos de toreo largo y de gusto. El poco tino con la espada le volvió a cerrar las puertas del triunfo lo cual le hizo que se fuera de vacío del coso de Añover.

Desde Albacete llegó Diego Carretero, que enjaretó al segundo del festejo unas verónicas de ensueño rematadas por una preciosa media. Tuvo el mejor lote de la tarde, correspondiéndole dos toros de triunfo

Cuando cogió la muleta el gusto le rezumó por las manos y llevó a su oponente con suavidad desde las tablas hasta el tercio. Allí desarrolló una faena compacta y completa con detalles en los finales. Pero todo buen comienzo requiere un buen final, y en este caso la espada no entró a la primera y por derecho, lo cual le cerró el doble triunfo que Carretero tenía seguro en sus manos.

Al quinto de la tarde lo toreó de forma variada con la capa llegando a contactar con las gradas. Lo mejor de su trasteo fueron los derechazos bajos y largos a su corriente, siempre refrendados con pases de pecho y trincherillas ovacionadas por los asistentes. Acabó con el toro de una estocada en lo alto volcándose en el morrillo, lo que le valió las dos orejas del astado de Gomez de Morales, premiado con una merecida vuelta a ruedo

La cuota toledana del cartel la ponía Angel Tellez, matador de toros de Mora que el año 2020 lo pasó en blanco. Téllez toreó con mucho gusto por bajo con la capa variada y sobre todo con entrega. Entregado desde el principio de la faena, consiguió llevar al toro templado en la muleta por ambos pitones, destacando naturales de ensueño. Muy firme ante un toro nada claro y estando por encima en todo momento. Falló con los aceros y eso le cerró un premio que se había ganado por pundonor y entrega.

Sonaba la jota tocada maravillosamente por la banda de música de Añover y salía el toro que cerraba plaza. El astado cinqueño de Gómez de Morales, astifino y cuajado como todos sus hermanos, fue recibido al son de la música y bailes en la grada por Ángel Tellez, que consiguió unos lances maravillosos ceñidos y encajados con el capote que encandilaron al respetable.

Ya con la noche echada y con la muleta en la mano, se fue decidido a por el animal, al que toreó de manera prodigiosa por ambos pitones. Destacó la tanda majestuosa al natural. Trazos largos enroscándose al toro a la cintura y llegando con clamor al tendido.

Tras unos remates con estatuarios ceñidos y detalles finales se tiró por derecho y no pudo matar al toro, perdiendo los trofeos que tenía en la mano.

El público le agradeció su labor toda la tarde y le despidió con palmas de cariño. Al final, en volandas, salió por la puerta grande el albaceteño Diego Carretero, siendo el triunfador del primer festejo de la feria de Añover de Tajo.