El Rey congela su sueldo y destina el de Don Juan Carlos a la renovación digital de la Jefatura del Estado

Además, la cuantía de la asignación que recibía Don Juan Carlos (194.232 euros brutos al año), y que Don Felipe le retiró el pasado mes de marzo, se destinará a otras partidas, entre ellas la renovación digital de la Jefatura del Estado.

De esta forma, el Rey seguirá percibiendo 253.850 euros brutos , la Reina Doña Letizia recibirá 139.610 y Doña Sofía 114.240, euros. La cuantía total destinada a la Familia Real era de 679.818 euros en 2018, se ha reducido a 507.700 euros en 2021. Como se sabe, ni la Princesa de Asturias, que tiene quince años, ni la Infanta Sofía, de trece, perciben asignación alguna del presupuesto. De la cuantía total que el Estado destina cada año a la Casa del Rey, solo el 6,02 por ciento corresponde a las asignaciones que perciben los miembros de la Familia Real.

Como ya publicó ABC, la Casa del Rey recibirá en 2021 la misma cantidad que percibió en 2018, 2019 y 2020 (7.887.150 euros), a pesar de que el resto de los ministerios y órganos constitucionales han experimentado este año una subida del 41 por ciento. Mientras la Casa del Rey hacía público ayer el reparto de su ajustado presupuesto, se conoció que el Gobierno había llegado a un acuerdo con el partido de Íñigo Errejón por el que se destinarán 50 millones de euros —el presupuesto de más de seis años de la Jefatura del Estado— a intentar implantar la jornada laboral de 32 horas o cuatro días semanales. Y todo ello en un país con altos niveles de desempleo.

En esta ocasión, el Gobierno ha añadido al presupuesto congelado de la Casa del Rey la cantidad de 544.000 euros , lo que puede generar cierta confusión. Esta cantidad no corresponde a ninguna subida, sino que obedece al pago de una deuda que el Estado mantenía con la Casa del Rey después de que la Jefatura del Estado tuviera que adelantar unos pagos no contemplados en los presupuestos anteriores. En concreto, La Zarzuela abonó las subidas de las retribuciones del personal y las variaciones en las cotizaciones a la Seguridad Social de los años 2019 y 2020. Por ello, la cantidad que aparece en la ley de Presupuestos Generales del Estado para la Casa del Rey es de 8.431.150 euros.

El reparto de los presupuestos de la Casa del Rey para este año se ha realizado de la siguiente forma: gastos de personal (4.101.332 euros), gastos corrientes (2.934.650), inversiones (719.558), Familia Real (507.700) y fondo de contingencia (168.000).

Los gastos de personal, que es el capítulo más importante y también el que más sube —representa el 48,64 por ciento del Presupuesto—, incluyen el incremento de hasta un máximo del 0,9 por ciento para el personal del sector público. No obstante, en esta subida hay una excepción, el jefe de la Casa del Rey, Jaime Alfonsín, cuyas retribuciones no experimentarán subida alguna , al igual que las de los miembros de la Familia Real.

Según explicó la Casa del Rey, la distribución del presupuesto se ha realizado teniendo en cuenta, entre otros factores, la voluntad de impulsar al proyecto de transformación digital de la Jefatura del Estado iniciado en 2019. Por ello, aumenta el gasto en adquisición de recursos, asesoría y trabajos técnicos dentro del ámbito de las tecnologías de la información y la comunicación. Ya en 2020, durante los peores momentos de la pandemia, igual que ocurrió en muchas instituciones y empresas, la Casa del Rey tuvo que facilitar el trabajo a distancia a todo el personal cuyo cometido no fuera estrictamente presencial y, para ello, se proporcionaron terminales portátiles, se adaptaron los sistemas y se incorporaron nuevas aplicaciones.

La segunda mayor partida del presupuesto es la destinada a gastos corrientes en bienes y servicios, que asciende a 2.934.550 euros (34,81 por ciento del total). Esta partida presenta un notable incremento para atender la transformación digital, a la que se destinarán, según los datos publicados por la Casa del Rey, más de 1,5 millones de euros: 597.000 para servicios de comunicaciones; 874.550 para asesoría y trabajos técnicos y 135.000 euros para arrendamientos y cánones.

Los presupuestos también vienen marcados por una instrucción del Rey, según la cual, los proyectos especiales que no puedan ser financiados con la cantidad aprobada cada año por las Cortes Generales deberán ser soportados con cargo al «remanente de tesorería no afectado» de la Casa del Rey, pero en ningún caso podrá solicitarse un crédito extraordinario.