La historia de superación de Rafael Afonso: el mecánico que llevó a Renault a liderar ventas en Canarias

La apertura de la economía española impulsó la llegada de liquidez al archipiélago a través de los puertos y los primeros grupos de turistas en San Agustín y Puerto de la Cruz.

Ocho años después, la sociedad se ubicó en la zona industrial Miller Bajo y desde 1982 está vinculada a Renault. Luego vino las superficies de ventas y reparaciones de Los Tarahales, Diego Vega Sarmiento, Eufemiano Fuentes Cabrera y Luis Correa Medina, en la antigua sede de Lita. En 2012, la empresa familiar sumó Mazda a su oferta. La plantilla media anual es de 79 empleados .

Rafael Alfonso creó un sólido grupo empresarial empleando el conocimiento de la calle y la palabra. Era de esos mecánicos capaces de arreglar motores de camiones con los ojos vendados. Experto en vehículos para empresas industriales antes de dar el salto a automóviles particulares, fue el primero en España en colocar de forma masiva la marca Dacia entre taxistas.

Arrancó de esta forma: alquiló un solar de cien metros cuadrados donde arreglaba vehículos por el día y, por la noche, se usaba para guardar camiones que, producto del desarrollismo de aquella época, estaban muy demandados en movimientos de tierras, transportes de escombros y mercancías. Después, comenzó a comprar propiedades industriales para aumentar servicios sin tener que recurrir mucho a los bancos.

Cuando Savehsa negoció con Afonso la gestión industrial de Renault en la provincia de Las Palmas, la empresa comenzó a crecer fuertemente. En lanzamiento de Renault en Canarias tiene su origen en un nombre: Santiago Álvarez Vidal, que creó Savehsa.

Hijo de un directivo del Banco Hispano Americano, Álvarez Vidal comenzó a vender Renault en Canarias en 1949 . La liberalización de las importaciones en las islas le permitía vender Daimler, Skoda o Volvo. Santiago Álvarez Hidalgo, su hijo, consolidó las relaciones de cooperación de su padre con Rafael Afonso.