Pérez Henares: «En la frontera se podía morir todos los días, pero la gente era libre y tenía propiedad»

Luis Miranda

Córdoba

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13/10/2022
Actualizado a las 22:10h.

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«Mi tierra». En la expresión hay un posesivo, pero Antonio Pérez Henares tiene claro cuál es el sentido: no le pertenece a uno, sino que uno es quien pertenece al lugar en que nace o en que crece. El escritor y periodista ha hablado de ello este jueves en el Foro Cultural de ABC Córdoba.

Pérez Henares ha presentado 'Tierra vieja', su última obra, en conversación con el director del foro, el escritor, historiador y colaborador de ABC José Calvo Poyato, y ha defendido que entre otras cosas la ha escrito para «pagar una deuda» con la comarca de Guadalajara en la que nació. Con su tierra, a la que pertenece.

Pérez Henares ha insistido en la importancia de los fueros, las leyes que se daban a las personas que iban a repoblar la frontera. «Era un lugar muy peligroso. Allí se podía morir todas las noches y todos los días, pero iban porque eran hombres libres y tenían tierras que podían transmitir a sus hijos«, ha explicado el autor.

Esa gente de a pie es la que protagoniza la novela, y Pérez Henares los ha calificado de «héroes, porque defendieron y ensancharon la frontera«. La novela, ha insistido, paga »una deuda con ellos«, con sus antepasados y con los ascendientes de gran parte de los españoles. Porque igual que uno pertenece a la tierra se convierte en «pavesas» cuando se desarraiga.

La conversación ha tocado asuntos como el de la conversión entre distintas religiones y la influencia de unas en otras. Antonio Pérez Henares ha hablado de la importancia de la Córdoba califal como un lugar en el que hay «una eclosión» con la llegada de los omeyas, que venían de Siria, «donde había mucha influencia grecorromana«, a Córdoba, »que había sido capital de la Bética y también una ciudad importante«.

En ese encuentro está la base de la importancia política y cultural de Córdoba, y cuando el Califato se derrumba el saber acumulado allí pasa «a la Escuela de Traductores de Toledo«. »Alfonso X El Sabio pidió traer todos los libros, que se tradujeron y desde ahí pasaron a toda Europa«, ha recordado.

Los mozárabes también han aparecido en las palabras del escritor, de forma que ha explicado que una tercera parte de los habitantes de Al Ándalus fueron cristianos que resistieron bajo el dominio musulmán. «De hecho, Fernando III no quería conquistar Córdoba, pero sabía que podía hacerlo a través de los barrios cristianos y supo que no tenía buena defensa«, ha contado.

La intervención de Antonio Pérez Henares ha sido todo un viaje a la Edad Media y la génesis de algunas de las más importantes órdenes militares, como Calatrava o Santiago, pero también hacia otras obras de Antonio Pérez Henares, como las que se dedican a la prehistoria. «El paleolítico me fascina», ha confesado.