A prisión el hacker Alcasec por vender datos de al menos 500.000 ciudadanos

Esa fue la ventana por la que entró en octubre a las bases de información de la Agencia Tributaria. Durante más de diez horas estuvo sacando datos bancarios de 575.186 contribuyentes, que luego transfirió a dos servidores alojados en Lituania, tal y como avanzó ABC.

En estos seis meses habría vendido esta información tributaria, números de cuenta y saldos bancarios, además de direcciones de correo, matrículas de coche, DNI y domicilios que ofertaba en distintos paquetes a través de la dark web, la zona 'oscura' de internet.

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Según el auto de la Audiencia Nacional, lo hacía con la plataforma uSms, que él mismo administraba, a cambio de al menos 13,5282 bitcoins, equivalentes a 543.514 dólares. Asimismo, constan ingresos en criptomonedas por más de 10.193 dólares. Para la venta, habría desarrollado una especie de buscador de Google, una base de datos orientada como un servicio de consultas y venta de información ilícita que él mismo denominó Udyat, ‘el ojo de Horus’, según informó el Ministerio del Interior. Llegó incluso a jactarse en Youtube de tener «acceso a información del 90% de los ciudadanos españoles».

Alcasec podría enfrentarse a una pena superior a cinco años de prisión, pues se le atribuye un delito continuado de revelación de secretos, que contempla una mayor sanción cuando los datos personales se difunden, revelan o ceden a terceros con fines lucrativos.

Además, tiene «importantes cantidades de criptomonedas que le permitirían disponer de liquidez suficiente para residir en cualquier parte del mundo, eludiendo la acción de la Justicia española», argumenta el magistrado José Luis Calama en su auto de prisión. Entiende que esta medida impide al detenido destruir posibles pruebas, «manipulando los repositorios informáticos donde tiene depositados los datos objeto de su actividad delictiva», así como evitar una posible reiteración delictiva. Cuenta con «capacidad demostrada», recuerda el juez.

Y es que el joven tiene una amplia trayectoria en el mundo de la ciberdelincuencia y la Policía le considera como una «amenaza muy grave para la seguridad nacional». En 2019, siendo menor de edad, ya pirateó la página de pedidos del Burger King, el sistema de Bicimad, la Dirección General de Tráfico o la base de la Policía. Además se le considera uno de los supuestos autores del hackeo masivo al sistema informático del Ayuntamiento de Granada.

Acabó en un centro de menores en Almería del que salió con el visto bueno de la Audiencia de Granada poco antes de protagonizar su último hackeo, el del PNJ, un ciberataque sin precedentes en la historia de nuestro país, según los investigadores. Destacan que Alcasec, de 19 años, llevaba una vida de lujos impropia de su edad y sin actividad laboral. Hacía viajes caros, vestía marcas exclusivas, frecuentaba lugares de moda e incluso conducía un vehículo de alta gama.

El joven pasó esta mañana a disposición del Juzgado de Instrucción de la Audiencia Nacional que dirige Calama, quien abrió una investigación secreta tras el robo masivo de datos en el PNJ contra altos organismos de la nación o de descubrimiento y revelación de secretos tras ser detenido por la Policía Nacional. La detención la llevó a cabo la Comisaría General de Información en el marco de una investigación conjunta con el Centro Criptológico Nacional.