De Villarroya a Esteban: dos crisis y dos dimisiones de altos funcionarios con dilatada experiencia al servicio de España

Ese es el resumen de las dos grandes tormentas que ha tenido que lidiar la ministra de Defensa, Margarita Robles, al frente del Ministerio de Defensa.

La primera fue provocada por una polémica campaña de vacunación contra el Covid por la cual altos mandos del Estado Mayor de la Defensa, con el Jemad Villarroya a la cabeza, se suministraron la primera dosis de la vacuna de Pfizer-BioNtech.

La dimisión del Jemad tuvo lugar el 23 de enero de 2021. El general Villarroya explicó su dimisión «con el objetivo de preservar la imagen de las Fuerzas Armadas» .

Se da la circunstancia de que aquel protocolo de vacunación, por el cual más de 300 militares recibieron la primera dosis en un momento en el que en el resto e la sociedad no les tocaba por edad, fue aprobado por la Inspección General de Sanidad de la Defensa, dependiente de la Subsecretaría de Defensa (cargo de confianza política).

Aquella vacunación en el Estado Mayor de la Defensa comenzó el 19 de enero, cuatro días antes de la vacunación y se procedió a ella tras recibir previamente la «Estrategia de Vacunación frente a Covid-19 en las Fuerzas Armadas».

Tras la dimisión del Jemad, como cortafuegos en el Ministerio de Defensa y de cara a los 300 vacunados, el general Villarroya fue recompensado, en cierta medida, dos meses después con un puesto en Washington como consejero de Defensa en la Misión Observadora Permanente de España ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) y asesor para Asuntos de Seguridad Hemisférica.

Se da la circunstancia de que el general Villarroya, en su papel de Jemad, tuvo un papel destacado en los momentos más difíciles de la pandemia del Covid-19 explicando las actuaciones de las Fuerzas Armadas y ofreciendo un punto de situación en lugar de hacerlo el Gobierno.

Ahora la dimisión de Paz Esteban, primera mujer en ocupar la dirección del CNI, se produce después de una trifulca con el independentismo catalán por el espionaje con software 'Pegasus', además de fallos de seguridad en los teléfonos del propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez , y al menos cuatro ministros.

La ministra Robles debe explicar en la rueda posterior al Consejo de Ministros las causas de la destitución de Esteban al frente del CNI, una profesional de la Inteligencia española con más de 40 años de experiencia y que asumió la dirección interina del Centro Nacional de Inteligencia en julio de 2019 para luego ser ratificada en febrero de 2020 en sustitución del general Félix Sanz Roldán.

Sobre todo, después de que la pasada semana defendienra la legalidad de la actuación del CNI, dependiente del Ministerio de Defensa.

Así, Robles indicó en la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados que la actuación del CNI estaba marcada por la legalidad: «No hay más que mirar las normas y en las normas está perfectamente recogido todo». Y defendió que las acusaciones «no se corresponden con la realidad».

Robles explicó que « por suerte» Esteban , que está aguantando «estoicamente estas acusaciones», podría decir lo que considere oportuno en la comisión de secretos oficiales (como así fue), aportando además documentos.