Soledad Cazorla se perfila como nueva fiscal de Sala para los casos de violencia contra la mujer
En Hospitalet y Badalona se registraron los primeros problemas en las nuevos órganos judiciales por falta de personal y de formación de los empleados
MADRID. La nueva Fiscalía Especial de Violencia sobre la Mujer será dirigida por un miembro de la carrera con categoría de fiscal de Sala -la más alta-. Para ocupar este cargo se perfila Soledad Cazorla, destinada en la actualidad en la Sala Penal del Tribunal ... Supremo, que parece haber conseguido lo que antes de las elecciones al Consejo Fiscal -en las que la conservadora Asociación de Fiscales (AF) obtuvo una abrumadora victoria- se antojaba imposible: ser una candidata de consenso.
Fuentes del Ministerio Público explican que el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, busca para este cargo a una mujer (de los cincuenta fiscales delegados para violencia doméstica, 38 son mujeres y 18 varones), razón por la que Cazorla tiene bastante ventaja sobre el segundo candidato más fuerte, Carlos Garzenmüller, un profesional curtido en la materia, miembro de la AF y, en la actualidad, fiscal en la Sala Civil del Supremo. La propuesta de Soledad Cazorla para el cargo se producirá, previsiblemente, en el Consejo Fiscal del 13 de julio. Esta mujer, vinculada al PSOE por razones familiares, es considerada por sus compañeros como una fiscal sólida e independiente y muy capacitada para dirigir la nueva Fiscalía Especial.
Noventa millones de euros
Precisamente ayer, el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, presentó acompañado por el titular de Trabajo, Jesús Caldera, la entrada en vigor de los capítulos penal y judicial de la ley contra la Violencia de Género. Para Aguilar, estas nuevas medidas llevan «el mensaje más potente lanzado desde el Gobierno» en relación a esta materia. Destaca la creación de 17 nuevos juzgados dedicados en exclusiva a la lucha contra los malos tratos, unidos a otros 433 de naturaleza mixta que compatibilizarán las causas de violencia doméstica con las del resto del ordenamiento jurídico, que empezaron a funcionar ayer. La inversión para poner en funcionamiento estos nuevos órganos ha alcanzado los 90 millones de euros: 26 para el incremento de la planta judicial, 13 para ampliación de plantilla, 8 para formación especializada, y 2 para informatización.
Sin embargo, pese a este incremento de medios, los primeros problemas ya se sucedieron en los nuevos juzgados el día de su estreno. Según fuentes del sindicato STAJ, en Hospitalet de Llobregat no hubo posibilidad de introducir informáticamente los datos de dos detenidos porque faltaba un formador que enseñara a los funcionarios a emplear la aplicación Temis 2. Mientras, en Badalona los funcionarios se quejaron porque una sola patrulla de los Mossos tuvo que ocuparse de dos detenidos por esta causa, mientras otros tres detenidos por otros delitos tuvieron que esperar en los calabozos.
Finalmente, el ministro detalló el nuevo plan de valoración forense para completar la asistencia preventiva a las víctimas. Para ello han creado una red de Unidades de Valoración Integral de Violencia de Género, con un total de doce equipos de psicólogos, asistentes sociales y médicos forenses.
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