«Siempre ha habido pateras, pero nada que ver con lo de ahora»

-¿Cómo se vive desde aquí que cientos de personas se embarquen en decenas de pateras cada día?

-El año pasado ya se duplicaron las cifras de 2016 y este, desde el inicio, se ha ido incrementando el volumen de llegadas. Con el verano, desde los primeros días de junio hasta ahora, se ha multiplicado considerablemente el número de personas rescatadas. Por ello, en Salvamento hemos reforzado, desde inicios de junio, tanto las unidades marítimas de la zona como las aéreas. Se han reforzado también las tripulaciones, ya que hemos añadido un miembro a cada turno y también hemos dispuesto una tercera tripulación para mejorar el descanso. Así podemos dar respuesta a todas las emergencias que estamos teniendo.

-¿Serán suficientes los medios que tiene ahora mismo Salvamento si las pateras siguen llegando a este ritmo?

-Es muy difícil hacer una previsión. En principio estamos respondiendo e incrementando los medios. ¿Hasta dónde puede llegar esto? Si esto se multiplica, tendremos que o aumentar nuestros propios medios o bien tirar de los de otros organismos colaboradores con la Administración del Estado con los que Salvamento mantiene convenios de colaboración para ser utilizados si llegara el caso: Guardia Civil, Armada, Ejército del Aire, Vigilancia Aduanera o Cruz Roja.

-¿Tienen precedentes algo así?

-Llevo aquí 23 años y en el Estrecho, dada la cercanía que tenemos con el norte de África, siempre ha habido emergencias relacionadas con la inmigración. Eso sí, nada que ver con lo que estamos viviendo ahora. La imigración es un fenómeno que para nosotros no es nuevo, aunque sí lo sea la intensidad que tenemos ahora mismo. Salvo en el año 2006, con el episodio de la crisis de los cayucos en Canarias, casi siempre hemos dado respuesta a la inmigración desde Salvamento Marítimo. Este año seguimos haciendo lo mismo.

-¿Qué le dicen los compañeros que están trabajando desde los barcos?

-Nuestra función termina una vez que los inmigrantes son rescatados y trasladados a un puerto seguro. Cruz Roja da después la primera asistencia sanitaria y luego ya entran Guardia Civil y Policía, encargadas de reseñar a esta gente y trasladarlos hasta los pabellones humanitarios. Se está empezando a ver que hay cierto colapso , cierta dificultad porque los centros, en este momento, están completos.

-No hay sitio para los inmigrantes en tierra y por eso ustedes tienen barcos parados. ¿Cómo les afecta?

-La situación ideal es disponer en todo momento de todas las unidades, no solo para atender emergencias de inmigración, sino cualquier otra. Pero ahora también tenemos la problemática de trasladar y alojar a todas estas personas. Esperemos que sea algo puntual, pero hay un problema.

-¿Qué embarcaciones se encuentran en el Estrecho?

-Dos tipos. Por un lado las que tratan de cruzar el Estrecho , que son de juguete, muy pequeñas y vienen a remo. En ellas viajan entre seis y doce personas de origen subsahariano. Por el otro hay embarcaciones más grandes, que suelen salir de la costa atlántica de Marruecos o de la zona de Alhucemas o de Nador, tratando de llegar a las costas de Málaga, Granada o Almería. Estas suelen ir sobre cargadas, con entre 35 y 60 personas y en ellas pueden llegar subsaharianos o magrebíes.

-¿Ha cambiado el perfil del inmigrante que atienden?

-La diferencia principal, que ya la comenzamos a detectar el año pasado, es que en las pateras vuelve a haber personas magrebíes.

-¿A cuántas personas rescata Salvamento cada día?

-Hasta ahora, en promedio, estábamos hablando de 2.000 personas anuales. El año pasado fueron más de 7.000 personas rescatadas en el Estrecho y este año en junio ya hemos llegado a ese nivel. En estos últimos días, desde hace dos jueves, estamos en un promedio de 250 personas diarias.