Sánchez rechaza reunirse con Rajoy y deja el diálogo a los equipos de trabajo

« Le digo a Rajoy que para hablar de investiduras , hay que hablar en los equipos negociadores. Vamos a seguir intentando construir esa mayoría parlamentaria que propicie que haya un gobierno de cambio», ha afirmado.

La última reunión entre Rajoy y Sánchez tuvo lugar en el Congreso el pasado día 12 , donde mostraron su distanciamiento al no darse la mano en público.

Sánchez ha lamentado que en las veces en las que ha podido hablar con Rajoy desde que asumió la secretaría general del PSOE en julio de 2014, « desgraciadamente le ha hecho muy poco caso en muchas de las cosas» que trataron, como la reforma de la Constitución o la cuestión de Cataluña.

Esta semana comenzó con un intercambio de declaraciones entre Rajoy y Sánchez. El presidente del Gobierno afirmó que llamaría al líder socialista esta semana para intentar cerrar una cita, a lo que Sánchez respondió recordándole que es él quien tiene ahora más respaldo parlamentario.

El líder del PSOE insistió en que «solamente habrá cambio» si los tres partidos políticos, PSOE, C’S y Podemos se ponen «de acuerdo», por lo que se mostró esperanzado en que se sumen más partidos al acuerdo suscrito con la formación que lidera Albert Rivera.

En la entrevista de hoy miércoles, Sánchez ha explicado que no se cierra a «ninguna formulación» y ha dejado abierta la puerta a un gobierno de coalición. Ha recalcado que «nunca» se ha «cerrado» a esta posibilidad, pero ha dado un paso más al apuntar que su partido no tiene fuerza para gobernar en solitario «porque así lo han querido los españoles» en las urnas.

«El PSOE con 90 diputados no tiene la fuerza suficiente como para tener un gobierno monocolor», ha dicho. Por eso, ha explicado que trabajará por un gobierno paritario, que «no va a ser un gobierno partidista, no va a ser monocolor», sino «transversal, que pueda ir al centro derecha y que pueda representar a la izquierda».

Sánchez no ha descartado la posibilidad de que Iglesias sea vicepresidente de un Ejecutivo socialista, pero ha recalcado que a lo que sí se cierra es a «las formas» que ha tenido el líder de Podemos. «Yo con chantajes no funciono», ha afirmado.