«Hay que salir a la calle y decir basta a este proceso tóxico»

¿Por qué salir a la calle? La respuesta del presidente de SCC, Fernando Sánchez Costa, es clara, enérgica y a la vez tranquila: «Porque estamos hartos». Desde SCC se entiende que, dos años después del otoño negro de 2017, las razones que llevaron a la entidad a convocar entonces dos masivas manifestaciones que dieron la vuelta al relato de la unanimidad procesista en la calle siguen vigentes. «Como en 2017, es importante que en Cataluña, en el conjunto de España y en el extranjero se entienda y se sepa que esto es una sociedad plural , que el independentismo no es mayoritario». Con las marchas constitucionalistas de 2017 se consiguió que «els carrers» dejaran de ser exclusivamente suyos, del independentismo, y que algo tan normal como pasear una bandera española dejase de ser una excentricidad en Barcelona.

Nada indica que el independentismo tenga ahora la fuerza y la unidad para forzar otra intentona como la de hace dos años, pero el momento vuelve a ser grave. «Cuando te pasas años haciendo apología de la desobediencia, relativizando el estado de derecho, deslegitimando las instituciones, cuestionando a la policía... todo esto acaba estallando, como se vio la pasada semana, demostrando que el procés es la ruina, empobrecimieto, desprestigio de Cataluña. Hay que salir a la calle para decir basta a este proceso tóxico. Torra debe irse de manera inmediata».

SCC, tras una etapa turbulenta, asegura haber recompuesto las relaciones con todos los partidos constitucionalistas , alguno de los cuales, Cs en concreto, acusó a la entidad de «tercerista», de tener una actitud tibia. Sánchez Costa niega este extremo, recuerda que SCC es una asociación transversal y plantea los mínimos políticos de la entidad para la Cataluña post «procés»: «Reforma de la ley electoral catalana; neutralidad de las instituciones; normaliza- ción del español en la vida pública y en la escuela; despolitización de los medios y de los Mossos, y auditoria del coste del procés». Pablo Casado, Albert Rivera y representantes del PSOE asistirán a una marcha cuyo protagonismo se quiere otorgar a la la sociedad civil.

La manifestación, reconoce Sánchez Costa, es un grito de «hartazgo», pero quiere ser también una llamada «de esperanza, de afirmación, de que es posible darle la vuelta a la situación en Cataluña». «Con inteligencia, voluntad, recursos y movilización podemos conseguir que el independentismo pierda el poder», añade . «Para eso necesitamos el apoyo moral, o económico, que es también bienvenido, del resto de españoles. Les esperamos el domingo con los brazos abiertos, y juntos recuperar el espíritu de las manifestaciones de 2017».