Podemos e Izquierda Unida reeditan el «pacto de los botellines» para el 28-A

A nivel autonómico, se ha anunciado un preacuerdo para la Comunidad de Madrid. El plan de Podemos e IU es elaborar una nueva lista unitaria para ir juntos en las elecciones autonómicas de mayo después de que el portazo de Íñigo Errejón para concurrir con el sello de Más Madrid dinamitase el pacto anterior. La propuesta ha sido trasladada a la gestora que controla Podemos Madrid aunque la última palabra, ha asegurado Echenique, la tendrá el equipo técnico que gestiona ahora la región.

González, por su parte, ha revelado que las dos formaciones se presentarán por separado en Asturias y Navarra. Echenique ha mostrado prudencia y ha pedido «seguir trabajando para que haya acuerdo en la mayoría de las comunidades autónomas».

Izquierda Unida encabeza un total de 13 listas. El resto lo hará Podemos. Además de Garzón siendo el número uno en la candidatura unitaria en Málaga, los candidatos de IU liderán las listas en Segovia y en Palencia. Y las del Senado en Málaga, Granada, Córdona, Asturias, Cantabria, Ciudad Real, Albacete, Cáceres, La Rioja, Ávila, Zamora y Navarra. Cataluña y Galicia no cuentan porque tienen sus propias confluencias (En Comú Podem y En Marea) y por tanto tienen libertad para elaborar la candidatura .

Con este nuevo reparto si la coalición lograse tras las elecciones de abril los mismos resultados que en 2016 IU pasaría a ser tener un diputafo más, es decir, seis. Para las Europeas tendran el número dos, ya que será el diputado Pablo Bustinduy quien lidere la candidatura de «Unidas Podemos cambiar Europa».

Alberto Garzón ha confirmado que será el número uno en la candidatura por Málaga. «Hay que maximizar las posibilidades electorales», ha alegado el coordinador federal, en los pasillos del Congreso de los diputados.

Lo cierto es que la coalición a nivel nacional estaba cerrada desde mayo del año pasado después de que Pablo Iglesias y Garzón firmarán el acuerdo marco. Las bases, de hecho, avalaron repetir la confluencia tanto a nivel nacional como autonómico. El adelanto de las elecciones generales para abril, no obstante, modifica el escenario político, y obliga a los partidos a acelerar los trámites y a registrar las diferentes coaliciones antes del 15 de marzo.

Garzón ya anunció la semana pasada un referéndum entre los días 4 y 10 de marzo para que su militancia decidida si quieren reeditar o no la marca en este nuevo contexto político. En Podemos, no obstante, primero cerrarán sus confluencias con En Comú Podem e intentarán solventar sus diferencias con Equo y En Marea. Luego, decidirán cómo consultar una vez más a sus inscritos qué les parece repetir el pacto.

Los sondeos apuntan hacia el peor resultado histórico de Podemos y reflejan que la confluencia entre ambas formaciones se desinfla. Lo cierto es que ya en 2016 perdieron un millón de votos al decidir concurrir de la mano. La debacle de Adelante Andalucía en elecciones autonómicas de Andalucía el pasado de 2 de diciembre fue un primer test para vaticinar malos tiempos.

La coalición de Podemos e IU liderada en la Junta por Teresa Rodríguez quedó relegada a cuarta fuerza política con 17 parlamentarios y 584.040 votos, es decir, 300.000 votantes menos que en los anteriores comicios.