La Fiscalía pide archivar el caso Zapata al no ver intención de humillar a las víctimas

El concejal de Manuela Carmena, que dimitió de la cartera de Cultura pero no como edil de distrito, escribió en 2011 en la red social Twitter: «Han tenido que cerrar el cementario de las niñas de Alcasser para que no vaya Irene Villa a por repuestos». Zapata pidió perdón, explicó que no quería ofender y aseguró que sus comentarios eran parte de un debate sobre los límites de la libertad de expresión.

El Ministerio Público valora que Zapata ha pedido perdón a quien pudiera considerarse ofendido en varias ocasiones. «Dichas manifestaciones son incompatibles con la intención de proferir expresiones de humillación a las víctimas del terrorismo, y permiten excluir absolutamente que las expresiones del citado tuit hayan sido realizadas con la conciencia y voluntad de producir humillación , descrédito o menosprecio en Irene Villa, y en las víctimas del terrorismo como colectivo», explica la Fiscalía, en su escrito.

La aludida por el mensaje, Irene Villa, envió un escrito al juzgado asegurando que no le molestaban los mensajes. Villa sufrió amputaciones cuando era una niña por un atentado de ETA. La Sala de lo Penal, que ordenó reabrir la causa tras el archivo de Pedraz, explicó que, aun así, el delito de humillación a las víctimas protege la dignidad de todas las víctimas como colectivo, no de una concreta.

La Fiscalía, que renuncia a acusar a Zapata, concluye que el mensaje y la conducta del concejal son en conjunto «claramente excluyente de cualquier voluntad y finalidad ofensivas». El Ministerio Público añade que el comentario publicado en Twitter no contiene «ninguna expresión sobre terrorismo, laudatorias a ETA o sus acciones».