Cospedal simultaneará Defensa y Génova a la espera de la renovación interna

Otros altos cargos populares consultados día atrás por la posibilidad, ayer confirmada, de que Cospedal desembarcara en La Moncloa advertían del «sin sentido» que supondría crear ahora «un vacío institucional» en el partido con la salida inmediata de Cospedal, descartada. Y recordaban que ya antes Francisco Álvarez Cascos y Javier Arenas compaginaron la secretaría general del PP con sus cargos de vicepresidente político y ministro, respectivamente. «A priori es perfectamente compatible. Otra cosa es que si el partido va al congreso pinte más bien renovación» , apuntaba anoche un barón regional dibujando un escenario futuro abierto. Desde el entorno de la hoy ministra ya han deslizado que su deseo es seguir otro mandato al frente de Génova.

De cualquier modo, en el PP destacan que el presidente del Gobierno haya premiado con el Ministerio de Defensa la lealtad demostrada por Cospedal en los años más ingratos para sus siglas , que le han supuesto un desgaste de su propia imagen política, especialmente por el lastre de la corrupción entre sus filas. Pero también por la erosión de la gestión de la crisis del primer Gobierno de Rajoy y por la irrupción de nuevos partidos en la arena electoral, pese a lo cual e l PP «ha mantenido el tipo» ante las urnas.

El premio ministerial no se ha hecho extensible , sin embargo, a otros cargos orgánicos como los vicesecretarios sectoriales, a los que algunos situaron en las quinielas. A la espera de que se repartan los cargos en el Ejecutivo de segundo nivel, Fernando Martínez-Maillo, Pablo Casado, Javier Maroto y Andrea Levy se quedan con sus puestos orgánicos en Génova.

Desde el partido se aplaude el esfuerzo de renovación que ha hecho Rajoy de su gabinete, más rejuvenecido tras la salida de tres ministros a los que muchos daban por «amortizados»: José Manuel García-Margallo, Pedro Morenés y Jorge Fernández Díaz. Especialmente al último. «Jorge no podía seguir. Estaba achicharrado» , resumió ayer un dirigente del PP, que aplaudía la incorporación de tres nuevos ministros mucho más jóvenes: Dolors Montserrat (43 años), Íñigo de la Serna (45 años) y Álvaro Nadal (46 años). «Darán otro aire», festejan en el partido, donde celebran sobre todo el ascenso del alcalde de Santander .

Quien es más desconocido en el ecosistema de Génova es el nuevo titular de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis , diplomático de carrera, próximo al nuevo portavoz y ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo . Pero sí es familiar para los populares de La Moncloa, por ser su referencia en Bruselas. Un exministro de Rajoy aplaudió en conversación con ABC su fichaje: «Dastis es pura solvencia. En el Gobierno le conocíamos todos. Será la gran revelación», anticipa.

El portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando , saludó la renovación del Ejecutivo, que aúna experiencia en la gestión con nuevas caras para afrontar la etapa de diálogo con la oposición. Hernando, que se felicitó por la continuidad del equipo económico de Moncloa, con Guindos y Montoro a la cabeza, defendió la nueva condición de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría , en Administraciones Territoriales. «Tiene una gran capacidad de diálogo para hacer grandes políticas y ser capaz de coordinar grandes proyectos», dijo sobre quien asumirá la interlocución con Cataluña.