El Gobierno reconoce que el camino es difícil, «pero España saldrá adelante»

El ministro de Hacienda ha dejado claro que el Gobierno se siente respaldado por una mayoría de la sociedad y «sabe lo que tiene que hacer». No ha desperdiciado la ocasión para enviar su primer pullita al PSOE por la herencia que dejó. Tras insistir en que son los Presupuestos adecuados para la recesión que sufre España, ha subrayado que Zapatero anticipó las elecciones a noviembre precisamente para no tener que hacerlos.

Montoro no ha ahorrado en calificativos hiperrealistas sobre los Presupuestos: austeros, difíciles, realistas, nada amables... El objetivo prioritario, ha afirmado, sigue siendo la reducción del déficit público, desde el 8,5 por ciento que dejó el Gobierno socialista hasta el 3 por ciento en 2013, cuando, según ha dicho, desaparecerá el déficit estructural de España.

«El camino es difícil, por supuesto, pero el objetivo no se puede prolongar en el tiempo, ni puede haber dudas sobre ello». Montoro ha destacado lo único positivo de lo que podía presumir hoy: se ha mantenido el sueldo de los funcionarios , se han subido las pensiones y no ha habido reducción en las prestaciones por desempleo.

También ha tenido un mensajito para las comunidades autónomas : si hay dudas sobre España y sus Presupuestos, ha dicho, conciernen a las comunidades y corporaciones locales. «Hay dudas sobre la viabilidad financiera de comunidades», ha advertido, y ha anunciado que en la primera quincena de mayo habrá un Consejo de Política Fiscal y Financiera para que cada Comunidad presente su plan.

El ministro ha querido terminar con un mensaje algo más positivo: « España es un gran país , capaz de hacer frente a este desafío y de liderar Europa en estabilidad económica y en términos de empleo. Cuando España se pone en marcha, es capaz de darle la vuelta a una situación así, más pronto que tarde saldremos de la crisis».