Rajoy: «Cataluña ha sido grande cuando ha sido española y europea, es decir siempre»
Miguel Arias Cañete, en Barcelona: «El PSOE nos dejó un país al límite... y el mochuelo para nosotros»
M. CALLEJA / a. GUBERN
La campaña electoral de Mariano Rajoy y Miguel Arias Cañete ha parado este sábado en Barcelona. El presidente del Gobierno ha querido transmitir un mensaje de apoyo al PP catalán y ha subrayado que «Cataluña ha sido grande cuando ha sido española y europea. ... O sea, siempre».
En un ambiente festivo, en el Teatro Musical de Barcelona, y ante unas dos mil personas con centenares de banderas del PP, de Cataluña, de España y de la Unión Europea, Rajoy ha pedido el voto en las elecciones del 25 de mayo «por una Cataluña unida, española y europea, y no dividida ni fuera del mundo». El líder del PP se ha mostrado convencido de que el PP va a ganar las elecciones : «Y lo vamos a hacer con los votos de muchísimos ciudadanos de Cataluña. Y si no, al tiempo...»
Rajoy ha defendido el trabajo que está haciendo el PP de Cataluña, con Alicia Sánchez-Camacho al frente, porque hay «muchísima gente que vive más tranquila» solo por el hecho de que existe este partido y se escucha su voz. «Vosotros no sois nacionalistas, ni con matices ni sin ellos. Sois catalanes y no necesitáis que os dé nadie carnés de catalanismo». En una alusión indirecta al PSC, por sus vaivenes, ha elogiado al PP porque «este partido ha sabido permanecer siempre, como una roca, en la misma posición, con el mismo talante y con las mismas ideas». «Defendéis lo que Cataluña ha sido siempre, desde hace muchos siglos. Vosotros no os estáis inventando la historia, ni disfrazáis la realidad, ni repartís diplomas de catalanismo, ni queréis que todos piensen como vosotros», ha asegurado el presidente del PP. A su juicio, este partido es la garantía de que «en Cataluña no pasará nada que luego haya que lamentar».
Rajoy ha explicado que «no se puede ir a Europa a hacer experimentos, ni con el insensato horizonte de salir luego de ella. Eso no se le ocurre a nadie». El presidente popular ha defendido en Barcelona el «derecho a decidir» de todos los españoles sobre el futuro de su país.
En el mitin también ha intervenido el candidato popular, Miguel Arias Cañete, recibido con una clamorosa ovación y a gritos de «Cañete, Cañete...», algo así como una acogida de desagravio después de la controversia del día anterior en torno a sus manifestaciones sobre la socialista Elena Valenciano. Nada cohibido, se diría que nada afectado por la polémica, Cañete no obstante ha preferido no volver a pisar terreno minado para centrarse, principalmente, en la economía, y en el contraste entre las políticas socialistas y las que propugna su partido. Ahí, su mensaje ha sido claro, «hay que ganar para evitar que el PSOE ponga en marcha de nuevo las políticas que llevaron a millones de personas al paro».
Muy suelto, quizás para contrastar el encorsetamiento que se le cuestionó durante el debate televisivo, Cañete ha valorado la gestión de la crisis que ha hecho el presidente Rajoy, en contraste con la España «que nos dejó el Gobierno del PSOE... al borde del rescate. Nos dejaron un país al límite... y el mochuelo para nosotros». Esta vez sí aludiendo a Valenciano, el candidato Cañete se ha referido a la demanda de la socialista de recuperar políticas de mayor gasto público, «cuando el mayor ataque al estado del bienestar lo hizo el PSOE cuando gobernaba».
"Cada voto al PP es frenar el separatismo"
Antes de su intervención ha participado en el mitin la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, que sí ha centrado su intervención en el proceso soberanista, situando las elecciones europeas como una oportunidad para «parar el nacionalismo». «Cada voto al PP es frenar el separatismo», ha señalado la popular, que ha descrito a su partido como el único dique frente a la disgregación. «El PP es unidad frente a separación, pluralidad frente a quienes defienden la imposición y la hegemonia del pensamiento único», ha añadido Camacho, que se ha mostrado «tranquila y esperanzada» por el hecho de que el Gobierno de Mariano Rajoy se ha comprometido con claridad a no autorizar la consulta soberanista.
En una campaña en la que CiU y ERC plantean las europeas como algo así como un referéndum separatista anticipado, Sánchez-Camacho no se ha escondido ante el embate, señalando por constraste la candidatura del PP como la de la «unidad».
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