Señora Aguirre, ¿optará a la Alcaldía de Madrid o lo descarta?: «Ni lo uno ni lo otro»

-Lo que le quería plantearle es que dado que, sin embargo, sí continúa como presidenta del PP de Madrid, ¿piensa dejar el cargo cuando cumpla el actual mandato?

-Bueno, considero que la presidencia del PP provincial, aunque sea regional, no es estar en primera línea de la política. Pero, no, creo que no me voy a volver a presentar a la presidencia del partido. Ya lo decidiré, porque no ha pasado ni un año desde mi última elección, pero creo que no me volveré a presentar.

-O sea, que éste sería su último mandato…

-De momento, tengo pensado no volverme a presentar.

-Y en el caso de la Alcaldía de Madrid, las encuestas que circulan le sitúan a usted como mejor candidata posible para los votantes del PP. ¿Usted se plantea ser candidata o lo descarta totalmente?

-Ni lo uno ni lo otro.

-O sea, que no lo descarta…

-Lo siento mucho, pero yo no voy a mentir. No tengo ni idea de lo que voy a hacer en el futuro, pero ahora mismo no entra en mis planes la Alcaldía de Madrid.

-No se lo plantea…

-No, en absoluto.

-¿Le preocupa el deterioro de los grandes partidos en España y que el bipartidismo se diluya dando paso a un mapa político incierto?

-A mí no me preocupa eso. A mí me preocupa la lejanía, la distancia y la opinión que tienen los ciudadanos de los políticos. Me preocupa el paso atrás que se ha dado en ese sentido. En la Transición, los políticos tenían su profesión y estaban en la política un tiempo. Ahora, como hemos visto con la presidenta de la Junta de Andalucía, y no lo digo por el PSOE, también pasa en el PP..., van a la política señores y señoras como una actividad vitalicia. Y eso los ciudadanos lo entienden como lejanía.

-En su artículo del lunes en ABC, usted planteó hace unos días una propuesta de primarias y listas abiertas en el PP. ¿Me podía concretar esa propuesta? ¿Sería para todo: candidatos a cargos electos y para cargos internos de partido?

-Mi propuesta es que todos los militantes puedan votar a quién quieren como presidente del partido en su pueblo, en su provincia, en su región, y a quién quieren como alcalde, como presidente de su Comunidad, etcétera. Pero que puedan votar todos los militantes. En el momento en que se ponen compromisarios y la exigencia de un porcentaje alto de avales para poder presentarse, pues es muy difícil. Yo creo que hay que dar la posibilidad a esos militantes de decidir a qué candidato prefieren, darles la posiblidad de participar y hablar. Así lo hizo Bauzá en Baleares, con unos resultados fantásticos. Hubo dos candidatos. Él logró un 60% y el otro el 40%, y lo que hizo fue integrar al otro candidato. Y el PP de Baleares hoy es una piña. Lo importante es que el militante esté menos pendiente de lo que dice la cúpula del partido y más pendiente de lo que opinan los ciudadanos.

-Alguien puede decir que por qué no lo planteó usted antes en su partido y para su propia elección…

-Primero, uno en política siempre aprende algo nuevo. Yo llevo 29 años, y sigo aprendiendo. Segundo, la cuestión de la lejanía del ciudadano, del asqueo de los políticos, ha crecido de manera exponencial en el último año, sobre todo por la corrupción.

-¿Usted prohibiría las donaciones a los partidos?

-En absoluto. Se trata de dar transparencia. El que haga una donación tiene que figurar, como en Estados Unidos, en la página web. Si yo le doy 1.000 euros a Obama, tiene que aparecer para siempre que yo le he dado 1.000 euros a Obama. Pero tiene que ser transparente. Porque en el momento en que se prohíbe, se empieza a dar el dinero por debajo de la mesa.