Debacle sin precedentes de Ciudadanos, que hace aguas en el lugar donde nació

Cabe señalar que los naranjas venían de muy arriba, de rozar el cielo con los dedos, prácticamente. No en vano, las elecciones del 21 de diciembre de 2017, celebradas tras el 1-O y la intervención de la Generalitat con el 155, catapultaron a la formación de Albert Rivera, que obtuvo 36 diputados y una gran presencia mediática que engrasó su expansión por toda España. Con los resultados de hoy, el partido queda desautorizado en la comunidad en la que nació en 2006 como alternativa al nacionalismo. A partir de ahora, la formación tiene sus feudos en Andalucía y Madrid , donde gobierna de la mano del PP.

Así las cosas, las elecciones del 14-F han acabado de dar la puntilla a un proyecto político demediado tras las últimas elecciones generales, que precipitaron la caída de Rivera y su sustitución por Inés Arrimadas . Primero falló la elección del candidato. En un primer momento los militantes encumbraron en primarias a la diputada y senadora Lorena Roldán , pero la dirección del partido acabó sustituyéndola para poner en su lugar a Carlos Carrizosa . Roldán acabó marchándose al PPC y ahora será diputada por Barcelona con los populares.

La campaña de las últimas dos semanas tampoco ha ayudado a los liberales. Justo al inicio, la formación naranja se vio forzada a retirar los carteles del «abrazo» por problemas legales con el uso de las fotos que vestían los grafismos, y que tampoco habían gustado a la militancia. A partir de ese momento, al partido le resultó casi imposible desmontar el pesimismo que rodeó una formación muy castigada en las encuestas, que ya predecían desde el principio la caída certificada esta noche.