Felipe González y Alfonso Guerra insinúan que el PP intentó retrasar el fin de ETA

El antaño todopoderoso exvicepresidente, que ha sido el primero en subir al escenario, ha asegurado que la derecha no soporta que haya derrotado a la organización criminal un Gobierno socialista. "¿Qué habría hecho el tío del bigote? ; el líder de ahora -ha ironizado refiriéndose a Mariano Rajoy-seguro que le ha dicho: ‘José Mari, habla con tus amigos, esos a los que llamabas del MLNV, que hay encuestas, que esperen unos días a ver si me toca’".

Guerra ha defendido que se siente feliz porque por primera vez en más de 34 años "tenemos una campaña sin terroristas de ETA" y ha replicado en tono desafiante a los populares: "¡Pues no han podio esperar!... Se llama Alfredo y ha derrotado a ETA". "Sé que es políticamente incorrecto pero amarga la verdad y quiero echarla de la boca", ha remarcado.

En la misma línea, Felipe González ha recogido minutos después sus palabras y ha dado credibilidad a la posibilidad de que Rajoy intentara que la organización terrorista aguardara un poco y fuera él quien recogiera los frutos de su adiós una vez en el Gobierno. "¿Y si lo hubieran intentado?", ha planteado. Además, ha defendido que Rubalcaba lo ha hecho bien allá donde ha estado , mientras nadie tiene ningún recuerdo del paso del líder del PP por distintos ministerios, más allá del "chapapote y eso de los hilillos".

Unas 30.000 personas, según la organización, han llenado el Palacio de Deportes de Dos Hermanas para asistir al mitin en el que han participado, además del expresidente del Gobierno Felipe González y del cabeza de lista al Congreso por Sevilla, Alfonso Guerra, el candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba y el secretario general del PSOE-A y presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán.

Rubalcaba ha subrayado que acudir a las urnas el 20 es " más importante que nunca " para mantener el Estado del bienestar y ha advertido de que con la indiferencia no se construyen hospitales ni escuelas. A su juicio, esta campaña electoral será trascendental para que se puedan comparar la educación andaluza con la madrileña o la educación andaluza con la valenciana, "para que se vea que se pueden hace las cosas de otra manera".

También ha reiterado su compromiso de gastar dinero público para abaratar la contratación de nuevos trabajadores, especialmente jóvenes, y ha detallado que el gobierno se hará cargo de la Seguridad Social en ese caso si él llega a la Moncloa.

Todos los dirigentes socialistas que han participado en el acto han coincidido en la necesidad de votar . Alfonso Guerra ha pedido "moral de victoria" a los socialistas para evitar que el PP llegue al poder, convencido de que "si se pudo derribar el muro de la vergüenza de Berlín, ¿cómo no se va a poder derribar el muro de la infamia de los mercados?". "Id y convenced a las almas vírgenes que esperan nuestra palabra", les ha adoctrinado. Persuadido de que el principal enemigo del PSOE es la abstención y el desánimo, Guerra ha insistido en que los progresistas no deben resignarse pensando que "esto es lo que hay" y que "ya está todo perdido", porque la victoria es posible.

El ex vicepresidente del Gobierno ha apelado a los valores y a los principios de la socialdemocracia y los ha contrapuesto a los que, a su juicio, priman ahora en el mundo, en donde los países democráticos " no se ponen de acuerdo para condenar a un tirano que está asesinando a la gente en Siria y, sin embargo, condenan a un socialista en Grecia porque quiere convocar una consulta popular". "¿Qué democracia es ésta que condena una consulta y no condena un asesinato?", se ha preguntado, y ha subrayado que los culpables de la crisis no están en Grecia, sino en Wall Strett y en las entidades financieras del mundo, porque "Al Capone ha muerto, pero hoy la mafia se llama Lemans Brother y las agencias de calificación".

Tras resumir el programa del PP en la idea de "transferir fondos de los pobres y llevarlos a los ricos", Guerra ha calificado también de "lexa patria" que el líder de ese partido, Mariano Rajoy, anuncie que va a bajar los impuestos a las rentas del capital y va a reducir los salarios. Por eso, ha arengado a sus compañeros a ir a votar "para que haya un líder que sea inteligente, despierto, ágil, de pie", que no esté "tumbado, perezoso, con galbana, con desidia". "Queremos a Alfredo", ha enfatizado.