La Generalitat cifra en 21.982 millones el déficit fiscal catalán
Publica su cálculo de balanzas en plena negociación de la investidura
Un experto en financiación autonómica advierte del riesgo de hacer quitas de deuda a la carta
Vista de Barcelona
En pleno proceso de negociación para la investidura, y con el melón de la financiación autonómica aguardando como uno de los capítulos a abrir en una próxima legislatura que se anticipa condicionada por los partidos independentistas, la Generalitat hizo público su cálculo sobre el « ... déficit fiscal de Cataluña« del sector público estatal: 20.772 millones de euros en 2020 y 21.982 millones en 2021, equivalente al 9,66% de su PIB. Para el ejecutivo catalán, en manos de ERC, el déficit fiscal catalán está en «máximos históricos».
La Generalitat utilizó en este caso el sistema de cálculo que habitualmente arroja una cifra más abultada, el de flujo monetario, que contabiliza únicamente las inversiones hechas en cada territorio. Desdeñó en cambio otro de los posibles sistemas que se emplean para el cálculo de las balanzas, el cálculo llamado de carga-beneficio, que incluye por ejemplo las partidas de gasto público que financian bienes y servicios de ámbito nacional, como serías las partidas del Ministerio de Defensa o la de Exteriores, que benefician a todos los ciudadanos con independencia de su lugar de residencia.
Los cálculos los presentó la consejera de Economía y Hacienda de la Generalitat, Natàlia Mas, que denunció de entrada la «opacidad y falta de transparencia» del Gobierno, que no facilita información propia para evitar precisamente el uso político de las balanzas. Así, los cálculos del Govern se hicieron en base a los datos sacados del BOE: según las cifras facilitadas ayer, en 2021, los ingresos aportados a la caja común fueron 75.436 millones de euros, el 19,2% del total, mientras que las transferencias recibidas fueron 53.454 millones, el 13,6% del total. 2020 y 2021 son, según la Generalitat, el tercer y cuarto año de la serie histórica (1986) con un mayor porcentaje sobre el PIB.
Las balanzas fiscales no son un tecnicismo, sino un «castigo», denunció la consejera catalana, que ve un «ahogo financiero, sostenido, injusto y deliberado». Desde el inicio del 'procés', la Generalitat se ha negado a participar en cualquier foro multilateral entre el Gobierno y el resto de CC.AA en el que se discuta sobre financiación. ERC reclamó ayer que Cataluña recaude todos los impuestos, como en el País Vasco, mientras no se alcance la independencia.
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