Suez-Hidraqua hace de Benidorm un destino turístico «inteligente»

Denominado este laboratorio incorpora sistemas sofisticados como el que detecta mediante ondas y movimientos térmicos las concentraciones de población en el casco urbano de Benidorm para asegurar el caudal adecuado en cada momento del año, según sea temporada alta o baja, sin desperdiciar energía. Hidraqua ofrece a los hoteles unos sensores con los que pueden darse cuenta de cualquier fuga en las tuberías, que podrían pasar desapercibidas semanas al tener el riego en funcionamiento a diario.

De puertas hacia afuera, el centro ha representado ya de entrada una plataforma de lanzamiento para proyectos de colaboración con start up como Water Track, una herramienta que permite al ciudadano monitorizar su consumo de agua, y recibir alertas en el móvil si supera cierto volumen, por ejemplo. También, Drops, que aprovecha la red de localizaciones de la telelectura de los «contadores inteligentes» instalada en la ciudad para conocer la ubicación exacta de los niños –que llevan una pulsera especial– y evitar así que se pierdan en la playa. O Cidavi, un «portal integrador que ofrece información de valor para la planificación urbana», según fuentes de Hidraqua.

No en vano, una de las misiones asumidas por la compañía consiste en el asesoramiento a los ayuntamientos para tomar decisiones en estos aspectos del desarrollo de sus territorios con criterios de «sostenibilidad».

Las instalaciones han supuesto una inversión de más de dos millones de euros y seis empleos directos inicialmente, para un trabajo coordinado con técnicos muncipales y cobertura para la comarca de Benidorm y, en el futuro, proyección al resto de la provincia de Alicante.

Además de la eficiencia para garantizar, por ejemplo, la primordial calidad del agua de baño en un destino turístico como Benidorm, que dispara su población desde unos cien mil habitantes estables en invierno a más de medio millón en verano, Dinapsis Operation & Lab aspira a ser polo de atracción de «talento» desde las universidades, tal como anunció el director general de Hidraqua, Francisco Bartual.

Otras funciones del centro apuntan a hacer frente a ciberataques, de los que esta compañía ya ha sufrido en sus equipos informáticos, además de establecer protocolos para proteger infraestructuras «críticas» frente a posibles atentados, según las directrices en las que ya se ha empezado a trabajar desde las instituciones europeas. Esta línea de investigación e innovación les ha valido el reconocimiento ministerial como interlocutor para estas emergencias.

La empresa del grupo Suez también utiliza robots y drones para la vigilancia e inspección permanente de las conducciones de las redes de agua potable y saneamiento o alcantarillado, con el fin de actuar inmediatamente en pérdidas y proporcionar información permanente a sus bases de datos. De hecho, Benidorm ha alcanzado el 90% de aprovechamiento del suministro, es decir, solo un 5% de fugas, una cifra que los representantes de la compañía han situado como la más alta de Europa, ya que la media en España se encuentra en poco más del 80%.

El personal de Dinapsis puede afrontar con garantías emergencias como las inundaciones –frecuentes en la provincia de Alicante por las riadas– y algunos de los efectos del cambio climático, por ejemplo, con un sistema de alerta de lluvia intensa.

Durante la inauguración, Angel Simón, vicepresidente ejecutivo de Suez, destacó que «solo la colaboración entre empresas, administraciones y sociedad civil garantizará el acceso a los recursos naturales en el presente y también a las generaciones futuras».