El horizonte penal de Rato pasa ahora por los juzgados ordinarios
El Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid investiga presuntos delitos fiscales y de corrupción entre particulares
La absolución en la Audiencia Nacional del expresidente de Bankia y del FMI Rodrigo Rato por la salida a Bolsa de la entidad allana su periplo judicial, pero aún tiene asuntos pendientes en los juzgados ordinarios de Madrid relacionados con su patrimonio.
En concreto, el llamado 'Caso Rato' que se sigue en el Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid desde abril de 2015 investiga presuntas irregularidades fiscales derivadas de sus negocios particulares y comisiones durante su etapa al frente de Bankia. Se le imputaban al inicio cinco presuntos delitos contra la Hacienda Pública y de corrupción entre particulares.
El instructor puso a Rato a un pie del banquillo tras acordar auto de procesamiento por irregularidades en la concesión de unos contratos de publicidad cuando estaba al frente de Bankia. Era una de las múltiples piezas en que había articulado esa investigación de fondo sobre su patrimonio.
Sin embargo, en respuesta a un recurso, la Audiencia Provincial de Madrid revocó esa fragmentación en líneas separadas y ordenó unificar toda la causa. El auto de procesamiento quedó así anulado y ahora el instructor Antonio Serrano-Arnal debe decidir cuál será el siguiente paso.
Mientras tanto, sigue cumpliendo su condena por el caso de las 'Tarjetas black', una pieza separada de la macrocausa sobre Bankia por la que hoy ha resultado absuelto, y por la que fue sentenciado a cuatro años y medio de prisión por apropiación indebida y administración desleal. El fallo, de febrero de 2017, fue confirmado por el Tribunal Supremo en octubre de 2018.
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