Estos son los mecanismos que utilizará el Gobierno para rebajar los precios de la electricidad

La cuestión más importante es quién asumirá el coste que tendrá ese mecanismo. Según Presidencia, «los productores de electricidad que utilicen gas ofertarán sobre el precio de referencia, pero recibirán una compensación por la diferencia con el precio de mercado. Ese pago saldrá del sistema eléctrico, de los ahorros que se van a producir al bajar a todos los consumidores de electricidad los precios. La compensación se obtendrá de los beneficios extraordinarios que ahora ganan muchas centrales eléctricas y que, al dejar de ganarlas, permitirá bajar precios y realizar la compensación».

El Ejecutivo utilizará los denominados 'beneficios caídos del cielo', es decir, los ingresos extras obtenidos por las eléctricas con los contratos bilaterales a largo plazo cerrados en las últimas semanas. Las compañías del sector mantienen que el 90% de la energía que generan está vendida en contratos a largo plazo y a precios muy inferiores al mercado diario.

Desde el Gobierno explican que como el precio diario del mercado mayorista de la electricidad lo marcan las centrales que utilizan gas, con el nuevo mecanismo bajarán los precios de la luz.

Fuentes del sector eléctrico han revelado que no hay necesidad de intervención por parte del Gobierno porque un acuerdo entre las empresas gasistas y las compañías eléctricas sería posible dando lugar a un descenso generalizado de las tarifas eléctricas.

«Una rebaja del precio del gas de 10 euros el kWh, tendría un impacto muy positivo, alrededor de 25 euros, en el precio de la electricidad. Ello podría hacerse a través de un acuerdo de mercado, sin necesidad de intervención alguna por parte del gobierno».

Aun así, añaden, «mantendrían las gasistas un margen muy alto para el sector del gas, si tenemos en cuanto unos precios de la importación en torno a 60 euros (cifras de CNMC)».

Esta idea «muestra claramente que no existen los denominados 'windfall profits' o 'beneficios caídos del cielo' de las eléctricas. Si estos existieran, las propias eléctricas no tendrían interés en promover un precio del gas más ajustado».

Estas mismas fuentes declaran que según la Dirección General de Aduanas «el gas entra en España 58 euros el kWh , cifra media del mes de diciembre de 2021, y fue vendido ese mismo mes el mercado interno a 111. Un margen del 100%, es decir, venden al doble de lo que compran*·.

Las eléctricas, ante un margen tan brutal del gas, «propone negociar con las gasistas para que cada 10 euros de reducción de este amplio margen, el precio de la electricidad caiga 25 euros, sin necesidad de intervención del Gobierno».