CSIF, UGT y CC.OO. retrasan al 8 de junio la huelga de funcionarios

Para intentar solucionar este problema y poder mantener la unidad sindical contra los recortes salariales impuestos por el Gobierno de Zapatero, los tres sindicatos se han reunido y han acordado trasladar al 8 de junio la huelga de funcionarios. Ha habido fumata blanca y la buena voluntad de las tres centrales sindicales ha hecho posible una convocatoria unitaria, como así asegura a ABC el presidente de la CSIF, Domingo Fernández, al asegurar que "los trabajadores públicos no entenderían que cada uno fuéramos por nuestro lado". Igualmente, ha habido otro cambio, ya que las convocatorias que la CSIF iba a realizar el día 25 ante las subdelegaciones del Gobierno y las Delegaciones de Hacienda, se trasladanal día 20. Desde la CSIF, su presidente, Domingo Fernández, asegura que su objetivo es siempre «sumar esfuerzos y hacer una convocatoria única. La voluntad es la de unirnos todos para celebrar un único acto reivindicativo».

Pero en el caso de que no fuera posible alcanzar un acuerdo sobre la fecha de celebración de la huelga general, la CSIF no descarta organizar otra protesta junto con otros sindicatos de trabajadores públicos como el de enfermería SATSE o el policial CEP. Con estos últimos también mantendrán contactos.

El cambio de estrategia de UGT ha provocado esta disfunción, ya que el mismo día en el que Zapatero anunció los recortes, el miércoles, sólo la CSIF habló de una huelga general en la Función Público, advirtiendo que irían «solos o acompañados». En este primer momento, UGT y CC.OO. no dieron el paso adelante, aunque después si que UGT se precipitó a dar la fecha de la huelga sin consultar.

Al margen de la reunión para consensuar la nueva fecha de celebración de la huelga general, los sindicatos también esperan una llamada de la vicepresidencia primera del Gobierno para saber la fecha de celebración de la Mesa General de la Función Pública. Esta Mesa tiene que reunirse antes de que el Consejo de Ministro del próximo jueves apruebe el real decreto que modifica las leyes necesarias para aplicar los recortes impuestos por el Gobierno. Las únicas fechas de celebración son el martes o el miércoles.

Las fuentes sindicales consultadas por ABC apuntan a que el Gobierno no sabe cómo va a aplicar la media de un cinco por ciento de recorte y que su intención es negociarlo con los sindicatos en la Mesa General.