El vestuario, convencido: «Somos capaces de todo»

Mañana se miden al Atalanta con la ventaja de un gol conseguido en Bérgamo y Zidane no necesita insistir en la necesidad de no confiarse y salir a ganar. El entrenador nota en sus pupilos ese halo positivo que tantas veces ha vivido como futbolista y como técnico. Lo veteranos observan el título con la experiencia de haber conseguido cuatro. Ven la copa a seis partidos, a seis finales de distancia y ellos saben jugarlas más que nadie. Si pierden a lo largo de este trayecto, no será por inexperiencia.

Rodrygo puede ser titular en el sistema 4-4-2 que Zizou prepara para superar al cuadro italiano y entrar en los cuartos de final. El brasileño aspira a ser el delantero que acompañe a Benzema en el ataque, mientras Lucas Vázquez ejercerá de cuarto centrocampista para inyectar fuelle junto a Valverde y dejar que Modric y Kroos construyan fútbol con menos obligaciones destructivas. Ese trabajo físico de Valverde y de Lucas intentará paliar la ausencia del zapador, Casemiro, sancionado.

Nacho sería el lateral derecho en una defensa encabezada por Ramo como jefe, Varane como escudero y Mendy como lateral izquierdo. Atrás, Courtois, que tiene una cuenta pendiente con la Copa de Europa.

El problema del Real Madrid es el gol y Zinedine ha dialogado con sus hombres para que disparen más a puerta y no quieran elaborar tanto las jugadas para rematar en el área pequeña. R odrygo, Benzema, Kroos y Modric tienen un buen tiro a portería y hay que ejecutarlo sin miedo.

Eden Hazard espera tener protagonismo en el segundo tiempo del partrido. También sueña con la Champions.