Mourinho: «No escucho al Bernabéu»

Le preguntaron por el pisotón de Pepe y habló de la luna: «No sé. Tengo que ver lo que ha pasado con Pepe. Cristiano ha sido el mejor de nuestro equipo y de Pepe he de decir que ha hecho un gran trabajo para el grupo».

Preguntado sobre si entendería que al Bernabéu no le hubiera gustado su planteamiento, Mou hizo una sentencia: «Entiendo al Bernabéu pero no le escucho . El responsable soy yo, sobre todo cuando perdemos. La victoria tiene muchos padres y comprendo esto. La derrota solo tiene un padre, que soy yo. Lo acepto».

También tomó la responsabilidad de haber puesto a dos jugadores, como Carvalho y Altintop, que habían jugado muy poco: «Jugaron muy bien y otros que juegan más tiempo no lo hicieron tan bien. Ambos hicieron su trabajo y no perdimos por ellos».

Para el técnico blanco, la clave del partido estuvo en el tanto del empate: «No esperaba el gol a balón parado. Hemos tenido dos o tres salidas donde no entró el último pase. Ahí pudimos cerrar el partido. En el segundo tiempo buscamos terminar con los errores defensivos y nos hemos comido un gol a balón parado. Así no se puede ganar a un equipo como el Barcelona».

Respecto al bajón de su equipo en la segunda mitad comentó que «pensábamos que vendrían a por nosotros y que entonces tendríamos más huecos. Les esperábamos, pero el gol del empate ha sido decisivo . Mi equipo sabe que no puede cometer esa clase de errores. El 1-0 iba bien y nos daba opción de contragolpe, pero con ese tanto que recibimos todo se complicó. El equipo lo sintió psicológicamente y el Barcelona se creció. A partir de ahí ellos fueron dueños del partido y así llegó el segundo gol».

En cuanto a si la eliminatoria ya estaba decidida o aún había que esperar al segundo encuentro, Mourinho fue sincero: «Esto está abierto pero la verdad es que está difícil, por no decir que muy difícil». Fue presionado de nuevo sobre el pisotón de Pepe y al final tuvo que ceder un poco: «Si Pepe ha pisado intencionadamente a Messi es censurable».

Le preguntaron si pensaba que el equipo había sucumbido a la presión de ir ganando. No lo creía así el entrenador portugués: «Es mejor estar ganando que empatando o perdiendo. Repito que no puedes estar ganando y sufrir un gol de balón parado».

Por último, soltó una frase que era casi más un ruego que un comentario. Señaló con la mano que tras este partido le iban a zumbar pero bien desde los medios de comunicación, pero señaló que «lo que sí me gustaría es que mañana la gente me pegue a mí , pero que dejen a los jugadores en paz».