Al Barcelona le surge un problema en la portería

Cillessen sabe el interés que ha suscitado y el déficit de porteros contrastados que hay en Europa y las escasas opciones que tiene de desbancar a Ter Stegen, al que a su calidad se une la juventud que le hace presagiar una larga carrera. La libertad de Cillessen está tasada en los 60 millones de euros que figura en su cláusula de rescisión, cantidad que no se considera nada excesiva para un portero de primer orden. El Barcelona, satisfecho por el rendimiento del holandés, no valora la posibilidad de traspasarle, aunque la secretaría técnica ha desempolvado una lista de guardametas que tenían controlados por si, finalmente, Cillessen acaba marchándose del Camp Nou. Vicente Guaita es uno de los que más gustan y que podría encajar en el perfil necesario. Tim Krul, Rui Patricio o Joel Robles también están en la agenda del secretario técnico.

De todas formas, el Barcelona confía en que Cillessen no tense la cuerda y acabe quedándose y cumpla los tres años que le quedan . El cancerbero costó 13 millones de euros más otros dos en variables cuando se le fichó procedente del Ajax. «Creo que jugué bien en los partidos que me dio el técnico en la Copa del Rey. Tengo que esperar con paciencia, lo único que sé es que el club no quiere venderme», reconoció recientemente el neerlandés esta misma semana tras jugar con su selección . «El Arsenal y el Liverpool son buenos clubes, pero tengo que aceptar su decisión y continuar aquí. Esperaré a la pretemporada para saber qué deciden los dirigentes. Si quieren retenerme, tengo que aceptarlo porque firmé un contrato de cinco años », explicó, aunque sus quejas son un velado mensaje a la directiva azulgrana, que económicamente haría un gran negocio con la venta de Cillessen pero que deportivamente daría un paso atrás.